Las empresas se han aprovisionado de materias primas ante los cortes de la cadena de suministro
El PMI manufacturero español ha caído a los 56,2 puntos en diciembre desde los 57,1 puntos anteriores y en línea con lo previsto por el consenso del mercado, lo que supone su crecimiento más lento desde febrero.
El sector ha seguido expandiéndose a lo largo del último mes del 2021 aunque las dificultades para las compras de insumos y la inflación han frenado su crecimiento, según IHS Markit. Con este contexto, las sociedades se han afanado en tener provisiones, lo que ha provocado una cifra récord de compras de materias primas.
Pese a ello, lo han hecho en un entorno de precios muy alto, con repuntes de la inflación aupados por la energía y los cortes en la cadena de suministro. De hecho, los plazos de entrega se han extendido un poco más, dejándolo en una situación algo más grave.
Pese a la ralentización, la presión de capacidad persiste, con un aumento de la cartera de pedidos, contribuyendo a un modesto aumento de empleo gracias, también, a la mejora de la confianza.
"La escasez de insumos limitó en cierta medida las capacidades productivas, y las empresas siguieron esforzándose por abastecerse de materias primas y reforzar las existencias en la medida de lo posible. Esta compra anticipada de bienes probablemente exacerbe la presión sobre las cadenas de suministro, ya sometidas a tensión", comenta Paul Smith, director económico de IHS Markit.