Subió a una tasa trimestral del 0,5% y anualizada del 1,8% en el segundo trimestre
El crecimiento económico de Alemania se aceleró en el segundo trimestre gracias a la sólida demanda interna, aunque los analistas advierten que las tensiones comerciales globales y los riesgos políticos están nublando las perspectivas de crecimiento.
El Producto Interior Bruto (PIB) alemán subió a una tasa trimestral del 0,5% y anualizada del 1,8% en el segundo trimestre. Esas cifras suponen un repunte del crecimiento anual del 1,5% respecto al primer trimestre y coincide con el cálculo preliminar de medidos de agosto, según los datos de la Oficina Federal de Estadísticas de Alemania.
Este "impulso positivo" en el crecimiento se debe principalmente al buen funcionamiento de la economía nacional ya que las importaciones superaron a las exportaciones. Las importaciones aumentaron un 1,7% desde el primer trimestre, mientras que las exportaciones crecieron un 0,7%. El consumo de los hogares aumentó un 0,3% y el consumo del gobierno subió un 0,6% con respecto al primer trimestre.
Este "impulso positivo" en el crecimiento se debe principalmente a que las importaciones superaron a las exportaciones
La economía de Alemania ha estado tradicionalmente dominada por las exportaciones. La prominencia de ese sector ha disminuido en los últimos trimestres y las disputas comerciales entre EEUU y muchos de sus socios comerciales más importantes, incluida la Unión Europea, corren el riesgo de disminuir aún más su influencia.
Algunos analistas apuntan a que si EEUU mantiene la guerra por los aranceles a las automovilísticas se intensificará la desaceleración de la economía alemana a medida que nos acercamos al 2019. Sin embargo, todos los sectores de la economía alemana crecieron en el segundo trimestre, con una robusta actividad doméstica que ayuda a amortiguar los riesgos de una perspectiva comercial global incierta.
"Desafiando la crítica internacional a menudo escuchada, la economía ya está mostrando un modelo de crecimiento muy equilibrado", ha dicho uno de los analistas de ING. Desde Pantheon Macroeconomics consideran que el crecimiento caerá marginalmente en la segunda mitad del año con un crecimiento intertrimestral del 0,4% en el tercer y cuarto trimestre. Si estamos en lo cierto, significa que la tasa interanual caerá más allá del 1,6% en el cuarto trimestre, pero ese crecimiento anual será del 1,9%, añaden.
SUPERÁVIT RÉCORD HASTA JUNIO
El Tesoro alemán ha registrado un superávit presupuestario récord de 48.100 millones de euros en los seis primeros meses de 2018, equivalente al 2,9% del PIB, debido al impacto positivo en la recaudación del crecimiento de la economía y el empleo, así como por la moderación de las políticas de gasto, según la Oficina Federal de Estadística, Destatis.
El superávit de las administraciones públicas germanas refleja la diferencia entre unos ingresos de 761.800 millones y un gasto público de 713.700 millones, incluyendo un saldo positivo de 19.500 millones en el caso del Gobierno central y de 13.100 millones de los 'lander', mientras los ayuntamientos registraron un superávit de 6.600 millones y la seguridad social, de 9.000 millones.
Por su parte, la tendencia positiva del empleo permitió un incremento del 4,2% de las contribuciones sociales, mientras que los ingresos públicos también reflejan un crecimiento del 29,3% de los intereses y dividendos, particularmente a raíz del fuerte incremento del beneficio del Bundesbank.
Por otro lado, la oficina estadística germana ha confirmado su estimación preliminar de crecimiento del PIB en el segundo trimestre, cuando Alemania registró una expansión trimestral del 0,5%, una décima por encima del nivel observado en los primeros tres meses de 2018.
En comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior, la economía alemana experimentó un crecimiento del 2,3% en datos ajustados por precios, frente al 1,4% del primer trimestre de 2018, mientras que al ajustar por precios y calendario, la expansión del PIB fue del 2%, una décima menos que en el primer trimestre.