Recorta hasta el -0,5% anual su estimación a medida que "los nubarrones se acumulan"
Morgan Stanley ha decidido revisar a la baja su previsión de crecimiento económico de la eurozona para 2023 hasta el -0,5% anual a medida que "los nubarrones se acumulan en el cielo económico europeo".
"Con las encuestas empresariales indicando que la recesión probablemente ya se ha materializado en el tercer trimestre de 2022 y la inflación alcanzando el 10% en septiembre, revisamos a la baja nuestra previsión de crecimiento para 2023 hasta el -0,5% anual", explican en un informe publicado este viernes.
El banco estadounidense reconoce que "la recesión parece haber llegado ya", aunque no en todas partes. "Gracias al dinamismo de las actividades relacionadas con el turismo durante el verano, parecía posible que el PIB de la zona euro siguiera creciendo en el tercer trimestre de 2022. Sin embargo, las recientes encuestas empresariales apuntan en una dirección diferente. Los PMI hasta septiembre sugieren un descenso global del 0,1% en el tercer trimestre con una cierta heterogeneidad en Europa: Francia y España siguen creciendo, Alemania e Italia ya se contraen", detallan desde la entidad.
Morgan Stanley reconoce que la inflación es "muy alta" y advierte de que es probable que siga siendo alta en 2023. La inflación de la eurozona siguió subiendo en septiembre, alcanzando el 10,0% anual y superando las expectativas.
"La energía sigue siendo el principal motor, pero la presión inflacionista siguió extendiéndose a los componentes básicos", indican desde el banco.
"Tras los recientes anuncios de política económica, creemos que la inflación general de la zona euro ha alcanzado probablemente su máximo en septiembre. Nuestra previsión para 2022 se mantiene en el 8,2% anual, pero revisamos a la baja la de 2023 del 5,9% anual al 5,2%. Sin embargo, los riesgos siguen siendo elevados debido a la gran volatilidad de los mercados energéticos", comentan.