Los analistas esperan que el informe de mayo muestre signos de una "normalización continua"
Los mercados financieros centran su atención este viernes en el informe laboral correspondiente a mayo que se publicará en Estados Unidos, del que los analistas esperan nuevos signos de una "normalización continua" del mercado laboral. El pronóstico de consenso apunta a la creación de 185.000 puestos de trabajo en el quinto mes del año, lo que supondría un ligero repunte desde los 175.000 de abril, aunque seguiría mostrando un camino a la baja desde los 303.000 puestos creados en marzo.
"En general, es probable que el mensaje del informe de empleo de mayo sea de normalización continua, con una desaceleración del crecimiento general del empleo y un incremento de las ganancias relativamente moderado, aunque en un momento en el que la economía estadounidense sigue, para todos los efectos, en pleno empleo", destaca Michael Brown, estratega de investigación senior en Pepperstone.
Sin embargo, considera que el impacto de este informe de empleo será "limitado" para la Reserva Federal, "salvo que se produzca una sorpresa a la baja importante", puesto que "aunque los riesgos para el doble mandato de la Fed siguen equilibrándose mejor, es el lado de la inflación el que sigue teniendo prioridad a la hora de determinar el momento del primer recorte de tipos, y las autoridades continúan buscando 'confianza' en un retorno hacia el objetivo".
De esta manera, ve "probable que cualquier reacción al informe de empleo sea relativamente efímera, particularmente porque es poco probable que una serie de datos más calientes de lo esperado obliguen a la Reserva Federal a adoptar una dirección más agresiva, mientras que los mercados valoran sólo 44 puntos básicos de recortes este año".
Por otro lado, considera "poco probable que incluso un informe más frío de lo esperado provoque mucho más que una reacción instintiva, breve y moderada, dada la retórica anterior del presidente Powell de que 'un par de décimas' de aumento en la tasa de desempleo no sería suficiente para provocar una respuesta política".
En consecuencia, este analista ve probable que lo que diga Powell en la próxima reunión de la Fed, así como las cifras del IPC de mayo, que también se publicarán el 12 de junio, "provoquen una reacción del mercado más prolongada y significativa que el informe de empleo de mayo".
A la hora de analizar las cifras, este analista subraya que el pronóstico de 185.000 nóminas creadas en mayo "llevaría el promedio de 3 meses de aumento de empleo a 225.000, el más bajo en lo que va del año, con revisiones pendientes de las 2 versiones anteriores".
"Es importante destacar que tanto la cifra de consenso de mayo como el promedio de tres meses antes mencionado estarían en ese momento un poco por debajo del ritmo de 'equilibrio' de crecimiento del empleo necesario para que el aumento del empleo se mantenga a la par del incremento del tamaño de la fuerza laboral. Sin embargo, como siempre, el rango de estimaciones para las nóminas principales es amplio, de 120.000 a 258.000", indica.
El informe laboral de mayo también "debería mostrar una modesta aceleración en el ritmo de crecimiento de los ingresos promedio por hora, probablemente subiendo al 0,3% intermensual, desde el 0,2% anterior en abril".
"A su vez, es probable que esto deje el ritmo interanual de crecimiento de las ganancias sin cambios en 3,9%; un ritmo que representa un modesto crecimiento de las ganancias reales, pero que, lenta pero seguramente, se está volviendo cada vez más compatible con un retorno a una inflación del 2%", manifiesta Brown.
Asimismo, el desempleo general "debería permanecer en el 3,9% en mayo", lo que supondría "un nivel igual al más alto desde principios de 2022", aunque este analista considera que "sigue implicando –en la práctica– pleno empleo y un mercado laboral que sigue siendo relativamente ajustado".
"La participación de la fuerza laboral también debería enfatizar este punto, y se espera que se mantenga sin cambios, apenas por debajo de los máximos del ciclo del 62,7%", destaca.
En lo que respecta a la evolución por sectores, Brown recuerda que los últimos indicadores conocidos apuntan a una expansión del empleo en las manufacturas, mientras que el ritmo de contratación parece enfriarse en el sector servicios.
"Las encuestas PMI del ISM de mayo mostraron que el empleo manufacturero aumentó una vez más, con el subíndice de empleo aumentando a 51,1, desde 48,6. En cuanto a la métrica de servicios, el empleo continuó contrayéndose durante el mes, aunque a un ritmo más lento, y el subíndice correspondiente aumentó a 47,1", concluye.
Mientras la previsión de consenso apunta a la creación de 185.000 nuevas nóminas en mayo, los analistas de TD Securities se muestran menos optimistas y apuestan por un incremento de 170.000 empleos en el quinto mes del año.
También cuentan con previsiones menores para el sueldo promedio por hora, ya que anticipan un incremento salarial del 0,2% en el mes, frente al 0,3% de consenso, y del 3,8% para la comparativa interanual, una décima por debajo de lo proyectado por el mercado.
"Es probable que los mercados reaccionen más a una cifra más débil que a unos datos sólidos, pero es probable que los datos tengan que ser mucho más débiles dado que las expectativas de los inversores han disminuido. Los mercados prevén recortes de 50 puntos básicos para 2024, lo que probablemente suponga un límite en el corto plazo, ya que cualquier cambio significativo en los datos puede afectar de manera más significativa a los precios de 2025 y 2026", concluyen.