La despensa de moneda del Banco Popular de China se sitúa por debajo del nivel de los 3 billones de dólares
La reserva de divisas de China ha caído por debajo del nivel esperado por el consenso de mercado, hasta los 2,998 billones de dólares en enero. La despensa de moneda extranjera del Banco Popular de China ha perdido la barrera psicológica de los 3 billones antes de lo previsto y presenta una mordida de 12.300 millones en el primer mes de 2017.
Ante este hecho, la preocupación en los mercados globales acerca del ritmo al que la segunda potencia mundial está quemando su reserva de moneda se ha dejado notar. Analistas alertan de la velocidad con la que China está dilapidando sus caudales, a pesar de los esfuerzos de Pekín por acabar con la fuga de fondos mediante el aumento de los controles sobre los capitales.
Según declaraciones de Wayne Gordon, experto de UBS, a la CNBC, “las reservas de divisas de China seguirán desangrándose hasta alcanzar los 2,8 o 2,7 billones a finales de 2017, mientras el yuan se desplomará hasta las 7,2 unidades por cada dólar”.
Las autoridades chinas no permitirán una fuerte depreciación del yuan
Analistas de Ebury en cambio, creen que “las autoridades chinas no permitirán una fuerte depreciación del yuan”. “Uno de los objetivos a largo plazo de China es la internacionalización del yuan en términos de intercambio y una depreciación de la moneda podría agitar la confianza en esta divisa como resguardo de valor”, explican desde la firma.
“Nosotros por lo tanto continuamos esperando que las autoridades chinas mantengan su objetivo implícito, asegurándose de que el yuan permanece estable frente a su cesta de divisas de intercambio”, explican desde Ebury.
En cambio, desde Danske Bank esperan que "las corrientes de salida continúen mientras la economía china está bajo un nivel significativo de presión estructural, fruto de una deuda excesiva y demasiadas inversiones". "Aunque China está tomando medidas para amortiguar los flujos de salida mediante el endurecimiento de los controles, creemos que un drenaje gradual todavía es probable", señalan. Además, añaden que "con las tasas de aumento de la Fed y el crecimiento chino a punto de ralentizarse, se añaden nuevas razones para que aumente la presión sobre el yuan y la moneda se debilite más contra el dólar".