A los hospitales y farmacias se les están acabando los recursos
Mientras se acaba la jornada de votación del referéndum griego las noticias sobre la falta de recursos siguen alimentando la situación de incertidumbre sobre el futuro de Grecia. Ahora son los productos farmacéuticos la preocupación.
Desde que el control de capitales impuesto el pasado domingo, que ha supuesto un alto repentino del sistema bancario, algunos proveedores de medicamentos han dejado de suministrar la mercancía por la imposibilidad de pago.
El gobierno griego ha prohibido las transferencias de los bancos extranjeros y los créditos griegos ya no son aceptados fuera del país. Por el momento algunas farmacias cuentan con medicamentos suficientes para esta semana, pero pronto tendrán que hacer turnos para repartir medicinas como la insulina.
Consecuencia del miedo, los griegos se están haciendo con provisiones de comida y de gasolina
En los hospitales se vive una situación similar, teniendo que haber recurrido a los últimos fondos de reserva para hacer frente a los pagos. Muchos de los profesionales médicos coinciden en la falta de empatía de algunos de los proveedores de tratamientos oncológicos.
EL PAN Y EL PETRÓLEO SE MANTIENEN
Las tiendas de alimentación y las estaciones petroleras son uno de los pocos sectores que están teniendo una semana buena. Consecuencia del miedo, los griegos se están haciendo con provisiones de comida y de gasolina por si hubiese escasez de estos productos en el futuro.
Las que si están viendo reducidas gravemente sus ventas son las firmas de ropa y complementos, ya que los griegos se están quitando de comprar productos no esenciales. El gremio de los taxis también se está viendo muy afectado ya que el transporte público se ha establecido como gratuito durante los días en los que la banca este cerrada.
El turismo, pieza clave de la economía griega, está empezando a verse afectado, incluso algunas reservas están siendo canceladas. Hasta el día antes del bloqueo de capital, el turismo crecía un 3% respecto al mismo periodo del año anterior, pero tras el anuncio de la ruptura de negociaciones y el control financiero bajó un 17% y ahora ha disminuido hasta el 30%.
Pero un Sí como resultado del referéndum tampoco solucionarían los problemas que vive la población griega, solo les daría tiempo para lograr un acuerdo comprensivo entre el gobierno griego y sus acreedores.
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