El bono a 10 años alcanzó el martes máximos no vistos desde el mes de julio
El mercado de la deuda sigue digiriendo el acuerdo de Gobierno alcanzado este martes por el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el líder de Podemos, Pablo Iglesias. La prima de riesgo se mantiene cerca de máximos de un mes, cerca de los 71 puntos básicos, después de que el bono a 10 años alcanzara ayer un hito no visto desde el mes de julio.
En concreto, la rentabilidad exigida en el mercado secundario a la deuda española alcanzó el 0,454%, frente al 0,436% del cierre del martes y por encima del 0,400% registrado en la sesión del pasado viernes.
El pasado mes de agosto, el interés del bono español a diez años llegó a marcar un mínimo histórico del 0,023%. De este modo, el interés de los bonos españoles a diez años se mantiene por encima de la rentabilidad exigida a la deuda equivalente emitida por Portugal, que se situaba este martes en el 0,365%.
Tras los comicios celebrados el 28 de abril, la prima de riesgo también reaccionó moderadamente a la baja. Con todo, en aquel momento rondaba los 100 puntos básicos, un nivel del que ha ido cayendo conforme el BCE (Banco Central Europeo) inyectaba sus paquetes de estímulos y la rotación de las carteras llevaba al inversor a refugiarse en la deuda soberana ante el posible chaparrón macro que desembocara en una recesión.
Desde BNY Mellon Investment Management, recordaban ya el pasado viernes que "la incertidumbre política reinante desde las últimas elecciones prácticamente no ha dejado marca en el coste de la deuda española", algo que parece haber cambiado con el pacto para formar un Ejecutivo que integra un partido de izquierdas que asusta a empresarios y mercados.
Además, reconocían que "los bonos españoles al igual que los de otros mercados periféricos, vienen registrando un buen comportamiento gracias, en gran medida, a que el BCE ha flexibilizado aún más su política monetaria para hacer frente a la debilidad económica que experimentan los países del norte de Europa”.
De igual manera, aseveraban que era "poco probable" que el resultado electoral tuviera un impacto significativo en el euro. Al igual que en el Ibex que, como mucho, reaccionará también "con leves recortes por no haberse logrado una mayoría absoluta", según los citados expertos consultados por este medio.