La Comisión Europea rebaja por primera vez la previsión de crecimiento de España en 2018
Modera sus expectativas una décima hasta el 2,8% tras cuatro revisiones al alza
La Comisión Europea ha corregido a la baja sus previsiones de crecimiento para España desde el 2,9% que anticipó en mayo, según ha publicado el Ejecutivo Comunitario. En concreto, el organismo prevé que la economía española se expanda un 2,8% durante el presente ejercicio, una décima por encima del cuadro macro que presentó el Gobierno en primavera.
Se trata de la primera revisión negativa tras cuatro subidas consecutivas desde que en otoño de 2016, la Comisión publicara un crecimiento del 2,1% para este año. En mayo de 2017 lo subió al 2,4% para elevarlo otra décima más en noviembre, modificarlo de nuevo hasta el 2,6% durante el pasado febrero y dejarlo en el 2,9% en mayo.
Un escenario que escenifica la consolidación de riesgos como el impacto de la guerra comercial y el auge de prácticas proteccionistas al otro lado del Atlántico; o el mayor precio del petróleo. Los analistas aseguran que este fenómeno corresponde a una corrección general del panorama de la Eurozona y no necesariamente a una desaceleración del país.
El documento de Bruselas sobre España subraya que la economía española ha mostrado "pocas señales de ralentización" en lo que va de año, con un crecimiento del 0,7% en el primer trimestre y una estimación "similar" para el segundo gracias a indicadores como los datos de empleo. La Comisión Europea cree que el consumo y la inversión en construcción "seguirán siendo los componentes más dinámicos de la demanda". Sin embargo, el informe advierte de que el hecho de que la subida precio del petróleo sea "superior a lo esperado" puede tener un "impacto negativo" en la demanda doméstica de 2019.
El principal interrogante es si la rebaja que Bruselas ha anunciado este jueves se trata de una moderación puntual del crecimiento en España por los riesgos mencionados o si realmente la Comisión Europea ha comenzando a observar el fin del ciclo expansivo que nos ha acompañado en el último lustro.
En el lado positivo, Bruselas espera que las medidas expansionistas incluidas en el Presupuesto General del Estado de este año aporte un "impulso adicional" al crecimiento de este año, especialmente a través del consumo privado. También considera que el gasto de los consumidores "debería beneficiarse de un crecimiento de los salarios superior a lo previsto y de una creación de empleo dinámica".
La presentación de estas nuevas previsiones macroeconómicas del Ejecutivo comunitario, que únicamente incluyen nuevas estimaciones sobre crecimiento y no dan cifras actualizadas sobre déficit público, coincide con la visita a Bruselas de la ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, que esta tarde participará en la reunión de ministros de Finanzas de la eurozona (Eurogrupo).
