Los expertos del banco privado suizo analizan la naturaleza de la crisis energética europea
Europa se enfrenta a una de las peores crisis energéticas de su historia. El aumento de los precios de la energía es uno de los más feroces y duraderos hasta el momento. Pero para los expertos de Julius Baer, el aumento de precios parece ser una consecuencia de los eventos en los mercados de energía, no del mercado de gas natural en sí.
El banco privado suizo pone de manifiesto la existencia de un gran temor de que los apagones nucleares franceses se prolonguen hasta bien entrado el invierno y requieran que otras centrales eléctricas compensen su déficit. "La crisis energética de Europa ha cambiado lentamente su naturaleza y ahora se trata más de la flota nuclear de Francia que de los flujos de gas rusos", indican.
Los precios del gas en Europa marcan récord diario y superan los 300 euros por megavatio hora. "Sin embargo, los mecanismos detrás de la acción del precio son todo menos sencillos y, por lo tanto, la forma en que evolucionará la situación sigue siendo muy incierta a corto plazo", apuntan.
Las reservas de gas en el conjunto del Viejo Continente se sitúan 76,92%, cerca de la meta de lograr el 80% de la capacidad de almacenaje en cada país de la Unión Europea el próximo noviembre. En este sentido, desde Julius Baer consideran que "no existe un déficit de almacenamiento real o emergente que pueda impulsar los precios".
"Con la próxima temporada de calefacción de invierno, la competencia entre compradores europeos y asiáticos se intensifica. Sin embargo, y a diferencia del otoño pasado, cuando este mecanismo estaba en juego, los precios asiáticos siguen con un descuento significativo. Las compras asiáticas parecen contribuir solo parcialmente a la situación actual".
No obstante, los acontecimientos en el mercado eléctrico parecen extenderse al mercado del gas natural. "Existe un gran temor de que los apagones nucleares franceses duren hasta bien entrado el invierno y requieran que otras centrales eléctricas compensen su déficit", ya que el operador de red francés ha insinuado que algunos reactores están en fase de revisión o trabajos de mantenimiento, lo que ha provocado un descenso de la generación de energía a través de la fuente nuclear.
"El mercado del gas natural se ve en la necesidad de compensar ambas deficiencias. Fundamentalmente, solo existen barreras muy blandas que rompen los mecanismos de precios en curso, y estas son principalmente la destrucción de la demanda. Parece que ha llegado el momento de una intervención política eficaz, como la subasta de créditos de carbono. O parece que los franceses podrían necesitar un apoyo serio de los ingenieros europeos para arreglar sus reactores nucleares a tiempo para el invierno en beneficio de todos", concluyen.