El índice general mejora las previsiones del consenso
El deflactor de consumo privado PCE en Estados Unidos se ha moderado más de lo esperado en agosto hasta el 2,2% en tasa interanual, desde el 2,5% de julio, según los datos publicados este viernes por la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio estadounidense. En cuanto a la inflación subyacente, ha registrado un ligero repunte y se ha situado en el 2,7%, frente al 2,6% del mes anterior, y en línea con las expectativas.
En términos mensuales, la tasa general ha avanzado un 0,1%, por lo que mejora levemente la subida de julio (+0,2%) e iguala las previsiones de consenso. La variable subyacente, por su parte, también se ha anotado un incremento del 0,1% y ofrece una lectura más positiva que el 0,2% del mes previo y estimado por el mercado.
Con respecto al mes anterior, los precios de los bienes han disminuido 0,2% y los precios de los servicios han sumado un 0,2%. Los precios de los alimentos han aumentado un 0,1% y los de la energía han bajado un 0,8%.
Y frente al mismo mes de 2023, los precios de los bienes han caído un 0,9% y los precios de los servicios se han incrementado un 3,7%; mientras que los de los alimentos se han elevado un 1,1% y los de la energía han disminuido un 5,0%.
Además, los ingresos personales han subido un 0,2% en tasa mensual (50.500 millones de dólares), al igual que los ingresos personales disponibles (34.200 millones de dólares) y los gastos de consumo personal (47.200 millones de dólares).
"Tras la decisión de la Reserva Federal de aplicar un recorte mayor de 50 puntos básicos, es probable que el informe del índice PCE haya hecho temer a los inversores que la Fed hubiera optado por un recorte de 25 puntos básicos. Afortunadamente, el indicador de inflación preferido de la Fed no mostró ninguna evolución preocupante en el mes de agosto, ya que tanto el PCE subyacente intermensual como el índice de precios PCE interanual no cumplieron las expectativas", valora Bret Kenwell, analista de inversiones de eToro.
Para el experto, "aunque los recortes de tipos de la Reserva Federal tardarán en calar en el sistema financiero, la inflación parece seguir una senda descendente sostenida. Aunque la lucha de la Fed contra la inflación no ha terminado, tiene sentido centrarse en el mercado laboral, que ha mostrado debilidad en los últimos meses".
Quasar Elizundia, estratega de investigación de Pepperstone, afirma que "los datos de PCE y de gasto personal sugieren un enfriamiento de la inflación y el consumo, lo que aumenta la probabilidad de un ciclo de recortes de tasas más agresivo por parte de la Fed, mientras que el dólar estadounidense enfrenta presiones a la baja en los mercados de divisas".