El índice de clima empresarial se deteriora 4,3 puntos, hasta 84,3
El sentimiento de la economía alemana se ha deteriorado considerablemente. El índice de clima empresarial IFO cayó a 84,3 puntos en septiembre, frente a los 88,6 puntos (ajustados estacionalmente) de agosto. Este es su valor más bajo desde mayo de 2020. El descenso afecta a los cuatro sectores de la economía.
"Las empresas evaluaron su negocio actual como claramente peor. El pesimismo respecto a los próximos meses ha crecido decididamente; en el comercio minorista, las expectativas han caído a un mínimo histórico. La economía alemana está entrando en recesión", señala el Instituto IFO en su comunicado.
"El IFO de septiembre confirma que la recesión de Alemania está aquí", afirman los economistas de Oxford Economics. "Las impresiones sectoriales tampoco mostraron puntos brillantes, ya que ahora el subcomponente de servicios también apunta a una recesión. El deterioro de las perspectivas fue generalizado en todos los sectores", comentan.
En la industria manufacturera, el índice cayó de forma tangible. Las empresas están menos satisfechas con su actividad actual. Están definitivamente preocupadas por los próximos seis meses. La última vez que las expectativas fueron tan pesimistas fue en abril de 2020. El estado de ánimo se ha ha agravado en casi todos los sectores. Las carteras de pedidos se redujeron aún más.
En el sector de los servicios, el índice de clima empresarial cayó en picado. Las evaluaciones de la situación actual fueron significativamente peores. Las empresas también prevén un mayor deterioro en los próximos meses. El sector de la hostelería se prepara para tiempos especialmente difíciles.
En el comercio, el clima empresarial volvió a empeorar. Por primera vez desde febrero de 2021, la situación empresarial vuelve a ser negativa. Las expectativas también se oscurecieron aún más.
"La situación también parece grave a nivel sectorial. Todos los sectores económicos se encuentran ahora en territorio de contracción; de hecho, el subcomponente de los servicios, que era el único sector que resistía bien en agosto, cayó 10,3 puntos y ahora apunta a una recesión", explican desde Oxford Economics.
"La debilidad fue generalizada, ya que el estado de ánimo en todos los sectores volvió a deteriorarse; las carteras de pedidos de los fabricantes volvieron a reducirse, y los sectores del comercio y la construcción también cayeron en picado. Estos resultados reafirman nuestras expectativas de que este invierno se produzca una recesión en Alemania, que llevará a una caída del 0,8% del PIB en 2023", concluyen.