El Fondo de Reserva de la Seguridad Social llegó a acumular 66.815 millones de euros
El Fondo de Reserva de la Seguridad Social cerró el año 2017 con un valor de 8.085,37 millones de euros, el 0,72% del PIB, según recoge el 'Informe sobre la Evolución, actuaciones y situación del Fondo de Reserva 2017', que esta mañana entregó la nueva ministra de Empleo y Seguridad Social, Magdalena Valerio, a la presidenta del Congreso, Ana Pastor. Una entrega que tradicionalmente se entrega a finales del primer trimestre.
A lo largo del pasado ejercicio, el Gobierno acudió dos veces al Fondo, coincidiendo con el abono doble de la nómina de pensiones en julio y diciembre, paga ordinaria y extraordinaria. En el séptimo mes del año se dispuso de 3.5514 millones de euros y en el último, de 3.586 millones. Escenario que mermó la capacidad del Fondo hasta los 7.100 millones y que se recuperó en los últimos días del año hasta los 8.085 millones.
Asimismo, la Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2017 recogió un préstamo a la Seguridad Social por un importe de 10.192 millones de euros y que se libró conjuntamente con las disposiciones del Fondo en dos momentos: de nuevo julio (5.986 millones) y diciembre (4.206 millones). Al finalizar el ejercicio, el Fondo generó 173 millones en rendimientos netos, su cifra más baja desde el año 2002.
VALERIO NO DESCARTA RECURRIR AL FONDO ESTE AÑO
"A mi me encantaría no tener que tocar el Fondo de Reserva pero quiero ser prudente. Vamos a ver cómo va evolucionando la recaudación de cuotas de aquí a final de año (...). Si tenemos que sacar algo del Fondo de Reserva tendremos que sacarlo, porque los pensionistas tienen derecho a cobrar sus pagas extraordinarias", ha subrayado la ministra.
Valerio ha afirmado que, de momento, los ingresos por cotizaciones sociales están teniendo una evolución positiva, con un crecimiento mensual superior al 5%, y ha pedido prudencia para ver cómo evolucionan las cuentas del sistema en los próximos meses.
En cualquier caso, la ministra ha defendido la necesidad de que la recaudación de la Tesorería de la Seguridad Social "vaya a más", razón por la que el Gobierno se ha planteado implantar impuestos finalistas como el de la banca que, "aunque no resuelven el déficit del sistema al 100%", contribuyen a inyectar dinero en la caja de pensiones.