Urge al Gobierno de EEUU a reducir la deuda, subir impuestos y recortar el gasto
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado su informe sobre la economía estadounidense, en el que insta a la Reserva Federal a "esperar" para reducir los tipos de interés en el país "al menos hasta finales de 2024".
"A pesar del importante progreso logrado hasta la fecha para devolver la inflación a su objetivo del 2%, la Reserva Federal debería esperar para reducir su tasa de interés oficial al menos hasta finales de 2024. Con la economía avanzando a un ritmo impresionante, Estados Unidos no ha pagado un alto costo por la configuración actual de la política monetaria", destaca el organismo multilateral en el texto.
El FMI alerta sobre "los importantes riesgos al alza para la inflación, que se pusieron claramente de relieve con los resultados de los datos a principios de este año", por lo que considera que "sería prudente reducir la tasa de política sólo después de que haya evidencia más clara de que la inflación está regresando de manera sostenible a la meta del 2% del FOMC".
"Además, en el caso de que los datos de inflación entrantes sean intensos en los próximos meses, tal vez haya que considerar seriamente la posibilidad de eliminar el sesgo relajado en las comunicaciones de la Fed y, potencialmente, aumentar aún más la tasa de los fondos federales", agrega.
El informe del organismo también incluye una serie de recomendaciones para el Gobierno de EEUU, entre las que se incluyen la reducción de la deuda y del gasto público y una elevación de los impuestos.
"Existe una necesidad apremiante de revertir el actual aumento de la relación deuda pública-PIB. Se prevé que el déficit fiscal y la deuda del Gobierno general, como porcentaje del PIB, se mantendrán muy por encima de las previsiones previas a la pandemia a medio plazo", detalla.
Específicamente, el Fondo considera que, con las políticas actuales, la deuda del Gobierno general aumentará "de manera constante", hasta superar el 140% del PIB para 2032. También prevé que el déficit del Gobierno se mantenga acerca del 2,5% del PIB, "por encima de los niveles previstos".
"Estos déficits fiscales crónicos representan un desajuste político significativo y persistente que debe abordarse con urgencia. Para situar la relación deuda-PIB en una clara trayectoria descendente, será necesario un ajuste fiscal anticipado que conduzca a un superávit primario del Gobierno general de alrededor del 1% del PIB (un ajuste de alrededor del 4% del PIB en relación con el escenario base actual)", explica.
De esta manera, cree que "las autoridades tendrán que considerar cuidadosamente aumentar los impuestos indirectos, aumentar progresivamente los impuestos sobre la renta, eliminar una serie de gastos tributarios y reformar los programas de prestaciones sociales".
"Para implementar estas medidas será necesario tomar decisiones políticas difíciles a lo largo de varios años. Sin embargo, algunos de los ahorros fiscales resultantes de estos esfuerzos deberían utilizarse para aumentar el gasto en programas para aliviar la pobreza", concluye.