Cree que la economía española se enfriará en los próximos años: ve al PIB en el 2,5% en 2018 y en el 2,2% en 2019
La agencia de calificación Fitch ha decidido revisar tres décimas al alza su pronóstico de crecimiento de la economía española para el conjunto del actual ejercicio, hasta el 3,1%, debido a su fortaleza "inesperada" y a la prolongación de la recuperación. No obstante, no todo son buenas noticias, porque también ha advertido de que una escalada sostenida de las tensiones con Cataluña podría interferir de forma negativa en las previsiones futuras respecto al Producto Interior Bruto (PIB).
Fitch ya había alertado de la "tensión creciente" con Cataluña el pasado mes de julio, y ahora ha vuelto a hacer lo propio
En concreto, Fitch ha explicado que la economía española se aceleró en el segundo trimestre de este año a un 0,9% intertrimestral, lo que implica el crecimiento más rápido desde el tercer trimestre de 2015. Además, señala que este crecimiento se experimentó de forma generalizada en la economía, tanto en lo que respecta a la demanda interna como en las exportaciones netas, lo que ha demostrada una fortaleza económica "inesperada" y de mayor duración que la previamente estimada.
Y no sólo eso, porque la agencia ha explicado que este "fuerte" crecimiento económico se ha visto impulsado por una positiva dinámica en la creación de empleo, por unas condiciones financieras acomodaticias y por la recuperación del comercio mundial. Éste último factor está cobrando cada vez más protagonismo debido al aumento en el número de empresas españolas enfocadas en la exportación de sus productos y servicios.
Aunque advierte de las consecuencias del conflicto en Cataluña, y no es la única. El pasado viernes, otra agencia de calificación, S&P, evitó mejorar el rating de España por la tensión existente con la región, ante el desafío independentista de la Generalitat que preside Carles Puigdemont. Hay que recordar que Fitch ya había alertado de la "tensión creciente" con Cataluña el pasado mes de julio, y ahora ha vuelto a hacer lo propio.
Por otro lado, recoge Europa Press, Fitch ha señalado que la fortaleza lograda por el euro este 2017 se ha visto mitigada en el país por la competitividad de costes y los elevados márgenes de las empresas. La divisa única acumula una apreciación de más de un 10% frente a su cambio con el dólar en lo que va de año. De igual forma, la agencia ha indicado que el crédito a las empresas ha dejado de caer por primera vez en seis años, después de mantenerse estable en el primer trimestre del año en curso, mientras que el proceso de desapalancamiento en la economía española "está madurando".
Sin embargo, Fitch cree que la economía española se enfriará en los próximos años desde los máximos actuales, a medida que vaya absorbiendo su capacidad. Así, apunta a que el PIB se situará en el 2,5% en 2018 y en el 2,2% en 2019. No obstante, estos datos todavía seguirán muy por encima del crecimiento potencial del país, que se estima que se sitúa en el 1,3%.
Respecto a la inflación, la agencia indica que la mejora de la posición cíclica de la economía deberá de incrementar de forma gradual la inflación subyacente, que excluye los precios energéticos y de la alimentación dada su volatilidad. En este sentido, estima que los precios se situarán este año en el 1,4%, en el 1,3% en 2018 y en el 1,8% en 2019.
LA ECONOMÍA MUNDIAL, EN SU PUNTO "MÁS DULCE" DESDE 2010
La economía a nivel mundial ha mejorado "notablemente" este año y está en camino de registrar su expansión más rápida desde 2010, pero el fuerte crecimiento por encima de las tendencias potenciales, junto con las políticas altamente acomodaticias, podrían implicar un crecimiento aún mayor, según Fitch.
"Nuestras previsiones mundiales implican que la economía se encuentra, tanto este año como de cara a 2018, en su punto más dulce", ha señalado el economista jefe de Fitch, Brian Coulton, que no obstante ha apuntado que no es un patrón que esperan continuar observando en 2019 y más allá debido fundamentalmente al fin del apoyo por parte de la política monetaria.
De esta forma, Fitch pronostica que la economía mundial crecerá al 3,1% este año, lo que implica una revisión de cuatro décimas al alza respecto a su previsión del pasado mes de junio. Además, el crecimiento para 2018 se ha mejorado hasta el 3,2% desde el 3,1% anterior. En 2019 apunta a una expansión del 3%.
"Nuestras previsiones mundiales implican que la economía se encuentra, tanto este año como de cara a 2018, en su punto más dulce"
Las economías avanzadas se están viendo beneficiadas por la mejora de los mercados laborales y de las políticas macroeconómicas que apoyan al crecimiento, mientras que los países emergentes están experimentando una recuperación de la demanda, concretamente de las materias primas.
A nivel general, el comercio mundial, que ha alcanzado un máximo de seis años, se ha convertido en uno de los factores más relevantes a la hora de explicar el crecimiento económico, especialmente por el repunte de las importaciones chinas desde mediados de 2016.
No obstante, las perspectivas de crecimiento a medio plazo deben realizarse con "prudencia", señala la agencia, ya que el potencial de crecimiento desde el lado de la oferta en las economías avanzadas probablemente se verá atenuado por el envejecimiento demográfico y el lento crecimiento de la productividad.