La caída de la actividad del sector privado se mantiene en mayo, aunque a un ritmo menos intenso
La recuperación de los índices de actividad del sector privado de la Eurozona en mayo permite ya ver la luz al final del túnel. Es verdad que han mantenido la caída, pero a un ritmo mucho menos intenso que en abril, lo que ha devuelto las esperanzas. No obstante, los expertos apuntan que aún no se pueden echar las campanas al vuelo, porque la crisis del coronavirus sigue golpeando duramente a las economías. Lo peor puede estar por llegar, dicen, y estiman que el Producto Interior Bruto (PIB) de la región puede contraerse hasta un 18,7% en el segundo trimestre.
Esa es la peor previsión para el periodo abril-junio, y la hacen los analistas de Barclays. "Estamos en un largo y sinuoso camino de recuperación", afirma el banco británico en el comentario en el que analiza los datos del PMI de mayo. "Apunta a una desaceleración de la contracción económica, pero una contracción, no obstante", y aunque muestran "algunos signos tranquilizadores de que la contracción probablemente tocó fondo en abril", no se puede perder la cautela e interpretar estos datos con "demasiado optimismo".
De ahí que estos expertos hayan decidido no variar su previsión sobre el PIB. "Aún esperamos que la economía de la zona euro se contraiga un 18,7% en el segundo trimestre", señalan. Y es que aunque esperan una mayor relajación de las medidas de confinamiento en los próximos meses, algunas restricciones se mantendrán y "continuarán limitando la actividad económica en gran medida".
"La fabricación y los servicios siguen contrayéndose a un ritmo muy fuerte, a pesar de que ha mejorado desde la caída récord de abril", apunta por su parte EY. En Oxford Economics apuntan que a pesar de que los países de la Eurozona están flexibilizando las medidas de bloqueo, el índice se mantiene en un "profundo territorio contractivo, lo que respalda nuestra visión de una caída del PIB de la zona del euro de más del 10% en el segundo trimestre".
Como explican estos analistas, a medida que las medidas de contención disminuyan, la actividad económica "debería continuar repuntando según avanzamos hacia el segundo semestre". En todo caso, remarcan, "la fortaleza de esta recuperación dependerá de si la demanda puede recuperarse rápidamente, o si los consumidores nerviosos limitan sus gastos y las empresas inciertas reducen la inversión".
Los PMI han mejorado respecto a abril en toda la región del euro, pero algunos se han quedado por debajo de lo previsto. Es el caso de Alemania y Francia. "Aunque parece que hemos pasado la depresión, la actividad comercial sigue siendo muy débil. Creemos que ambas economías sufrirán importantes caídas del PIB en el segundo trimestre, y pese a que esperamos un repunte en el tercer trimestre, tomará algún tiempo recuperar todas las pérdidas", apuntan los expertos de Oxford.
La propia consultora Markit prevé que en el segundo trimestre el PIB caiga un 10%, y que la contracción total que sufra la economía de la Eurozona este 2020 sea del 9%. Son previsiones más halagüeñas que las que hacen en Pantheon Macroeconomics, que augura un golpe para el Producto Interior Bruto del 15% entre abril y junio. "Las condiciones siguen siendo muy difíciles", apunta en una nota, en la que recuerda que el PMI de mayo cubre un momento en que la mayoría de las economías permanecieron en un bloqueo total, por lo que habrá que esperar a ver los datos de junio para "obtener una muestra completa 'libre de bloqueo'".
Aunque destaca que "las condiciones siguen siendo muy difíciles en la Eurozona, ya que los bloqueos permanecen o se levantan lentamente". "La producción y los nuevos pedidos están en caída libre, lo que destruirá los datos del PIB del segundo trimestre", afirman los analistas de Pantheon.
Sobre el futuro de la economía de la zona euro, Bank of America lo tiene claro: "Es hora de prepararse para una débil recuperación". El banco estadounidense ha reducido su pronóstico del PIB para este año y ahora cree que la caída será del 8,3% (desde el 7,6% anterior), mientras que en 2021 la economía repuntará solo un 4,6% (antes auguraba un 8,3%). "La recuperación será débil, y las pérdidas permanentes de ingresos serán grandes", dice en su último informe sobre la región.
"La historia es simple: el bloqueo y la reapertura irán como se esperaba, pero la política fiscal aún no está a la altura de las necesidades", lo que significa "presión sobre las empresas, y por lo tanto sobre el gasto público", y que habrá "altos niveles de mano de obra no utilizada". Asimismo, "los hogares tomarán precauciones ahorrando". Todo esto es, según Bank of America, la "mezcla perfecta para una recuperación incompleta".