El dólar se mantiene presionado contra todos sus rivales
Tensión máxima en la crisis de la península de Corea que provoca un comportamiento en el mercado de las divisas que ya nos es familiar. Las ventas del dólar frente a las monedas consideradas refugio, como el yen y el franco suizo han vuelto a dominar el ánimo de los inversores, pero a diferencia de lo ocurrido en la jornada del 29 de agosto, el euro se mantiene impasible en esta ocasión, aguantando la franja de los 1,1900 dólares.
Los alcistas de la moneda compartida permanecen ajenos al movimiento que el último ensayo nuclear de Corea del Norte y la respuesta militar de Corea del Sur, que ha acordado con EEUU ampliar la capacidad de carga de sus misiles, y ha causado caídas en el dólar. Aunque el euro arrancó la semana negociándose en los 1,1880 dólares, el dato del indicador Sentix de confianza del consumidor, que ha prolongado sus máximos históricos en el mes de agosto, ofreció la excusa necesaria a los inversores para reconquistar la franja de los 1,1900 dólares, donde se mantiene este martes.
En este escenario, los operadores han vuelto a impulsar los activos refugio, como el yen y el franco suizo, pero no a la divisa comunitaria, que sí jugó un papel de 'safe haven' tras el lanzamiento del misil por parte de Pyongyang de finales de agosto, cuando se impulsó hasta el máximo de 31 meses, en los 1,2070 dólares. En cambio, la divisa nipona ha marcado nuevos mínimos de una semana, hasta negociarse alrededor de los 119,200 unidades contra el dólar, su mejor cambio desde precisamente el 29 de agosto, cuando se disparó la nueva escalada del conflicto coreano.
El franco suizo, por su parte, ha alargado la figura iniciada el lunes y ha sumado otro 0,2% a sus ganancias del lunes, del 0,7%, alcanzando el cambio de los 0,9548 francos por dólar. Contra el euro, el yen se negocia alrededor de las 130,00 unidades y la moneda de Suiza también alcanza máximos de una semana hasta los 1,1367 francos.
DRAGHI EN EL PUNTO DE MIRA
Una vez que la tensión disminuya, si es que lo hace, el foco se desplazará a las decisiones de política monetaria durante la reunión del BCE, que es "el mayor evento de riesgo de esta semana", subraya Hussein Sayed, estratega de FXTM. La pregunta crucial que enfrenta el banco central es si Mario Draghi anunciará el calendario propuesto para el plan de salida de su política de compra de bonos.
La división entre los analistas que esperan que la decisión de disminuir las compras de activos se anuncie este septiembre y quienes creen que se pospondrá hasta octubre, mantendrá al euro bajo presión. "Mario Draghi se ha abstenido de debilitar el euro a través de una intervención verbal, aunque el acta de la reunión de julio mostró preocupación por la fortaleza de la moneda única", recuerda Sayed.
También cree el experto que "cualquier intervención verbal probablemente conducirá a una nueva caída del euro desde sus niveles más altos en 2,5 años". "Sin embargo, si los datos económicos continúan sorprendiendo a la alza, el banco central tendrá dificultades para controlar a los más alcistas y regresará las compras a la moneda", indica el analista de FXTM.
EL FOCO VUELVE A LA ECONOMÍA DE EEUU
Del otro lado del Atlántico, el mercado estadounidense vuelve después de la jornada festiva del día del trabajador. Mientras los futuros apuntan a ventas en los índices, la operativa del dólar reaccionará a las intervenciones de los miembros de la Reserva Federal de EEUU (Fed) Lael Brainard and Neel Kashkari. Los inversores escrutarán sus palabras en busca de respuestas sobre la reducción del balance del banco central y de si hay alguna posibilidad de que haya el proyectado recorte de tipos de interés en diciembre.
“Es tentador alinearse con los factores que serán positivos para el ‘billete verde’ en el corto plazo, como la gran posibilidad de que los mercados empiecen a descontar la subida de tipos de la Fed de diciembre en algún momento de los próximos meses”, apuntan desde Danske Bank. Para los expertos de la entidad con sede en Copenhague es innegable que este asunt, junto al desempeño de la economía estadounidense están ganando “momentum”, pero ponen énfasis en que “cualquier corrección del euro/dólar será poco pronunciada y de contra duración” y creen que el cruce mantendrá un rango entre los 1,15 y los 1,20 dólares en las próximas semanas/meses.