El Tesoro emitirá 7.000 euros por segundo en deuda pública durante 2018

En concreto, el Tesoro Público tiene prevista una emisión bruta de 220.145 millones de euros. Si finalmente el año se cierra con esta cifra, se reducirá un 6% respecto a los 233.900 millones de euros de 2017. No obstante, hace un año el Tesoro anticipó la emisión de 220.017 millones de euros, una cifra que finalmente se disparó entre otras cosas por el crédito a la Seguridad Social de 10.192 millones de euros para pagar las extras de julio y diciembre de las pensiones públicas sin agotar del todo el Fondo de Reserva.

No obstante, este préstamo no aumentó ni el déficit ni la ratio de deuda sobre el Producto Interior Bruto (PIB), que roza el 100%, según destaca el Ministerio de Luis de Guindos. En términos netos, al descontar los vencimientos, la emisión será de 40.000 millones de euros, un 11% menos que los 45.031 millones de euros de 2017. "Los objetivos para este año vuelven a ser el incremento de la vida media de la deuda, la reducción de costes y la diversificación de la base de inversores", señala Economía en un comunicado. "Todo ello, en un contexto de recuperación económica en Europa y ante la previsible normalización gradual de la política monetaria en la Eurozona durante este ejercicio", añade.

Por ahora, el entorno de tipos bajos, con la política de 'dinero gratis' del Banco Central Europeo (BCE) y la compra de activos, permite una reducción progresiva del coste de la deuda. En este sentido, el coste medio de las nuevas emisiones durante el pasado año se mantuvo cerca de mínimos históricos, al incrementarse únicamente una centésima hasta el 0,62%. De esta forma, el coste de la deuda en circulación bajó al 2,55%, "la cifra más baja de la historia reciente del Tesoro", apunta el equipo de Luis de Guindos.

MENOR CARGA DE INTERESES

Economía calcula que la carga financiera en términos de Contabilidad Nacional se ha reducido un 12% entre 2014 y 2017, lo que supone un ahorro de 3.567 millones de euros. La carga de intereses ha caído un 9% respecto al Presupuesto en 2017. Es decir, ha habido un ahorro de 2.493 millones de euros, frente a la cantidad presupuestada de 32.171 millones de euros. Estas estimaciones van en la línea con el cálculo de un estudio publicado por el Banco de España en el que cifra en 10.000 millones de euros el ahorro en intereses por parte del Estado gracias al programa de compras de activos del BCE.

El abaratamiento del coste de la deuda seguirá durante los próximos años, según las previsiones del Gobierno recogidas en el Plan Presupuestario remitido a Bruselas, que espera que la carga de intereses se sitúe en el 2,6% del PIB en 2018 y se reduzca hasta el 2,5% en 2019 y 2020. Paralelamente, el Ejecutivo quiere aprovechar la coyuntura de la política monetaria y alargar la vida de la deuda antes de que expiren los estímulos desde Fráncfort. En la emisión bruta de este año, 126.310 millones de euros de la cantidad que pedirá prestada será a través de valores de medio y largo plazo, el 57% del total.

La vida media de la deuda en circulación ha aumentado ya desde los 6,2 años de 2013 hasta los 7,13 años de 2017, "reduciendo el riesgo de refinanciación de la deuda del Estado y la vulnerabilidad de la carga financiera ante la anunciada normalización de la política monetaria de la Zona Euro", insiste el Ministerio de Luis de Guindos. La concentración de las emisiones en los plazos largos -realizadas a 30 y 50 años- "ha sido posible gracias a la elevada demanda de valores del Tesoro en todo el ejercicio", añade el organismo. En cuanto a la base de los inversores, otro de los objetivos de Moncloa, los no residentes se mantuvieron con el 42% de la deuda, por la que han seguido apostando "incluso en los momentos de mayor tensión política en Cataluña", dice el Ministerio, que destaca además que incidirá en el programa de bonos y obligaciones indexados a la inflación europea, con una referencia indexada en la primera subasta del mes.