En tasa interanual, la economía británica crece un 2,3%, en línea con lo esperado
La segunda estimación del PIB del tercer trimestre en Reino Unido ha mostrado una subida del 0,5%, un dato que se ha situado en línea con la previsión del consenso del 0,5% y que también iguala el mismo crecimiento que el registrado en el trimestre anterior. En tasa interanual, la economía británica crece un 2,3%, en línea con la estimación del consenso del 2,3%.
Además, la inversión empresarial preliminar del tercer trimestre ha bajado un 1,6%. El consenso esperaba una caída del 2,1%, tras la caída del 0,8% del segundo trimestre. Tras la publicación de estos datos, la libra sube ligeramente un 0,06% frente al dólar, hasta 1,2458. Además, el FTSE 100, el principal índice bursátil de Londres, sube de manera muy suave un 0,01%, hasta 6.829 puntos, en línea con el resto de bolsas europeas. Según la Oficina Nacional de Estadísticas británica (Office for National Statistics), la economía de Reino Unido ha crecido de manera ininterrumpida durante los últimos quince trimestres.
Chris Williamson, economista jefe de IHS Markit, destaca la contribución positiva de la inversión empresarial y las exportaciones al crecimiento, "mientras las familias siguieron gastando". Este experto añade que "los datos sugieren un buen comportamiento en el cuarto trimestre", pero las previsiones apuntan a una desaceleración económica en 2017.
En este sentido, el ministro de Finanzas británico, Philip Hammond, dijo este miércoles, durante la presentación del primer informe económico tras la victoria del Brexit en las urnas, conocido como 'Autumn Statement', que el crecimiento económico del país se desacelerará el próximo año debido al triunfo de los partidarios de abandonar la Unión Europea (UE) en el referéndum del pasado 23 de junio.
Hammond reconoce que ahora hay un mayor grado de incertidumbre sobre la economía debido a la próxima salida de Reino Unido de la UE
La Oficina de Responsabilidad Presupuestaria británica (OBR por sus siglas en inglés) pronosticó que el Producto Interior Bruto (PIB) de Reino Unido crecerá un 2,1% en 2016, frente al 2% previsto en el momento informe que se dio a conocer el pasado mes de marzo. Además, rebajó sus perspectivas de crecimiento para 2017 hasta el 1,4%, frente al 2,2% anunciado en las últimas previsiones que se dieron a conocer antes de que se conociese la victoria del Brexit.
Los inversores estaban muy pendientes de estos datos, que muestran también que para 2018 el Ejecutivo británico estima que el crecimiento será del 1,7%, menos que lo anunciado antes del Brexit, cuando el pronóstico apuntaba a un crecimiento del 2,1%. Así, la Oficina no espera que el PIB de Reino Unido regrese hasta el 2,1% pre-referéndum hasta 2019. Y es que, como ha reconocido, ahora hay un mayor grado de incertidumbre sobre la economía debido a la próxima salida del país de la UE, y eso va a provocar que el crecimiento de la economía británica se vea reducido en 2,4 puntos porcentuales durante los próximos cinco años.
Hammond también afirmó que se prevé que el endeudamiento sea cada año más alto de lo previsto anteriormente, hasta el punto de que en 2016 el déficit público tocará los 68.200 millones de libras, aunque posteriormente pasará a 59.000 millones de libras en el periodo 2017/2018, y se irá reduciendo paulatinamente en los siguientes años hasta los 17.200 millones de libras esperados para 2022.
¿QUÉ PASARÁ CON LA DEUDA?
La deuda tocará su punto máximo entre 2017 y 2018, momento en el que alcanzará el 90,2% del PIB
Asimismo, la deuda va a ser otra de los grandes 'problemas' tras la victoria del Brexit. Según el ministro británico, va a tocar su punto máximo entre 2017 y 2018, momento en el que alcanzará el 90,2% del PIB. Hammond dijo que hay que tratar el nivel de deuda con "cuidado", ya que es uno de los más altos entre las naciones más ricas del mundo. Hace sólo un año, la deuda pública de Reino Unido equivalía al 84% del PIB, recoge CNBC.
El ministro de Finanzas explicó que ahora el plan es aportar dinamismo a la que es la quinta economía más grande del mundo y tratar de afrontar el alto déficit presupuestario antes de que Reino Unido inicie los trámites para abandonar la UE. El 'Autumn Statement' es una cita fija en el calendario que los inversores suelen usar para valorar los planes del Gobierno británico en materia de política económica y fiscal para los próximos años.