Las reservas de las empresas cayeron en 1,661 millones de barriles la semana pasada
Nuevo golpe para la cotización del petróleo. Los precios del Brent y el West Texas, referencias en Europa y Estados Unidos respectivamente, se desploman tras los datos de inventarios de la economía norteamericana y se acercan a los mínimos anuales.
En concreto, los datos de inventarios que publica la Agencia de Información de la Energía (EIA, por sus siglas en inglés) muestran una caída en las reservas de crudo de las empresas de 1,661 millones de barriles durante la semana pasada. Una cifra que está por debajo del descenso de 2,7 millones que proyectaba el consenso de analistas de Reuters. Sin embargo, los inversores necesitan poco para vender después del informe mensual de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que mostró un incremento de la producción en mayo de 336.barriles hasta los 32,14 millones de media.
En este caso, los datos de inventarios reflejan un incremento de 2,1 millones de barriles de gasolina en las reservas, frente a la estimación de que cayera en 457.000 barriles. Por su parte, los inventarios de destilados -incluye diésel y combustibles para la calefacción- aumentaron en 328.000 barriles, la mitad de lo esperado, según las estadísticas del órgano dependiente del Departamento de Energía y las estimaciones previas de los analistas seguidos por FactSet.
La reacción positiva del mercado inicialmente ante la reducción de producción que acordó el cártel se está desvaneciendo rápidamente
El barril tipo Brent cotiza en la bolsa de materias primas de Nueva York (Nymex, por sus siglas en inglés) con un descenso superior al 3,5% que hunde el precio hasta rozar los 47 dólares, muy cerca del mínimo anual que marcó el 5 de mayo en los 46,64 dólares. Por su parte, el West Texas pierde otro 3,7% y cae por debajo de los 45 dólares.
Más allá del dato de inventarios de las empresas estadounidenses, que provoca un brusco movimiento de los precios cuando se publica -en general, los miércoles-, de fondo siguen las dudas acerca de la producción de la OPEP y de la demanda global. "La reacción positiva del mercado inicialmente ante la reducción de producción que acordó el cártel se está desvaneciendo rápidamente. Los inversores son escépticos sobre la idea de que 'hará lo que sea necesario'", arguyen los analistas de ETF Securities.