Representa el 1,53% del PIB, un 2,01% menos que en los diez primeros meses del año pasado
El déficit del conjunto de las administraciones públicas, sin contar con las corporaciones locales, se redujo un 20,8% en los nueve primeros meses del año, hasta los 18.585 millones de euros, lo que equivale al 1,53% del PIB, un 2,01% menos que el año anterior.
El déficit del Estado se redujo un 36,8% en los diez primeros meses del año, hasta los 8.384 millones de euros. Esto representa el 0,69% del Producto Interior Bruto (PIB), frente al 1,14% del mismo periodo del año anterior, según ha publicado este martes el Ministerio de Hacienda.
Esta reducción se debe, en gran parte, a la mejora de un 8,5% de los ingresos impositivos. La mejora en el déficit del Estado se debe fundamentalmente al incremento de los recursos no financieros, que crecen un 9% frente a los gastos no financieros, que aumentan un 5,4%.
Si se descuentas los intereses devengados, el saldo primario positivo asciende al 1,11% del PIB, frente al superávit primario del 0,74% del PIB existente en el mismo periodo de 2017.
Por su parte, el superávit primario, es decir, la diferencia entre ingresos y gastos sin tener en cuenta el pago de los intereses de la deuda, asciende hasta los 13.413 millones hasta octubre, lo que supone un incremento del 56% respecto al superávit primario registrado en el mismo periodo de 2017.
La mejora en el déficit del Estado se debe fundamentalmente al incremento de los recursos no financieros, que crecen un 9%
Los recursos no financieros del Estado se elevaron hasta octubre a 167.937 millones de euros, lo que supone un incremento interanual del 9%.
Los ingresos por impuestos en los primeros diez meses de 2018 ascienden hasta los 145.961 millones, lo que supone un 8,5% más. De esa cifra, 82.759 millones corresponden a impuestos sobre la producción y las importaciones, entre los que se encuentra el IVA, que crece un 6,5% interanual y alcanza los 61.739 millones de euros.
Por su parte, los impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio aumentan un 13,5% hasta los 63.078 millones. En este grupo de impuestos se encuadra, entre otros, el IRPF, que crece un 11,3%. También el Impuesto sobre Sociedades aumenta un 15,1% debido fundamentalmente al segundo pago fraccionado, que mejora un 23,1% respecto al año pasado. Destaca igualmente el incremento del Impuesto sobre la Renta de los no Residentes un 27,5% interanual.
Los gastos no financieros del Estado se sitúan en 176.321 millones de euros, lo que supone un aumento del 5,4% hasta el mes de octubre. En general todas las partidas de gasto aumentan destacando la evolución de las transferencias corrientes y de capital entre Administraciones Públicas, que son las partidas de mayor volumen (un 58,3% del gasto del Estado), y que crecen un 5% respecto al año anterior.
Las transferencias corrientes crecen un 4,9%, en especial, las realizadas a los Fondos de la Seguridad Social al aumentar un 10,4%, debido a que se han transferido al Sistema 1.893 millones más que en 2017 (1.112 millones para apoyar el equilibrio presupuestario del Sistema sin correspondencia en 2017). Por su parte, las transferencias de capital crecen un 8,8%, sobre todo, por el incremento de 216 millones a las Comunidades Autónomas debido al mayor ritmo de ejecución de determinadas partidas, como el Desarrollo del medio rural y el Plan Estatal de Vivienda 2018 – 2021.
En los tres primeros trimestres del año el déficit consolidado de las Administraciones Públicas, excluyendo las Corporaciones Locales, es de 18.585 millones de euros. Esta cifra no incluye el saldo neto de las ayudas a instituciones financieras, que a finales de septiembre presenta un importe positivo de 33 millones. En términos de PIB, el déficit es equivalente al 1,53% en septiembre, por debajo del 2,01% registrado en el mismo periodo de 2017.
La Administración Central registró hasta el tercer trimestre del año un déficit del 1,22% del PIB, excluyendo la ayuda financiera
La Administración Central registró hasta el tercer trimestre del año un déficit del 1,22% del PIB, excluyendo la ayuda financiera. Si se incorpora dicha partida el déficit sería también del 1,22% del PIB, incluyendo el déficit del Estado (1,09% del PIB) así como el de los organismos de la Administración Central (0,13% del PIB) correspondientes al mes de septiembre.
El déficit de la Administración Central se ha reducido en un 16,8% respecto al registrado en el mismo periodo de 2017, debido al incremento de los ingresos en un 8,2%, frente al aumento de los gastos en un 5,4%.
Mientras, la Administración Regional ha registrado hasta septiembre un superávit de 2.035 millones, frente al superávit de 481 millones registrado en el mismo periodo del año anterior. Este resultado se debe fundamentalmente a la evolución de los ingresos, que crecen un 5,5% frente al menor aumento de los gastos (4,3%).
Los Fondos de la Seguridad Social han obtenido un déficit de 5.848 millones de euros hasta septiembre, un 11,2% inferior al registrado en el mismo periodo del ejercicio anterior. Los recursos se han incrementado un 5,2%, destacando la evolución favorable de las cotizaciones, que aumentan un 5,3%. Por su parte los empleos se incrementan un 4,3%.