La capitalización total pierde otros 150.000 millones de dólares en doce horas hasta los 550.000 millones
El boom de las criptodivisas mantiene a reguladores financieros y autoridades monetarias en estado de alerta y no pasa un día sin que lo que se conoce como 'prima de riesgo regulatorio' deje huella en este floreciente mercado. Las noticias sobre la prohibición del comercio con ‘criptos’ en Corea del Sur han vuelto a provocar una profunda corrección en las monedas de cifrado, que se han teñido de rojo intenso y han perdido más de 100.000 millones en su acumulado en un abrir y cerrar de ojos. El bitcoin se ha desplomado un 17% hasta los 11.500 dólares, mínimos de casi seis semanas, desde donde se recupera hasta los 12.000 dólares.
Después de que el sábado logró cotizar más allá de los 14.000 dólares, ha cedido hacia los 13.000 dólares desde entonces, donde ha consolidado hasta este martes, y se mantiene bajo presión en una nueva jornada de pérdidas en las principales monedas por capitalización de mercado que mide CoinMarketCap. La última caída deja al bitcoin más de un 40% por debajo de los máximos históricos de alrededor de los 20.000 dólares alcanzados a mediados de diciembre, borrando alrededor de 125.000 millones de su acumulado.
La última caída deja al bitcoin más de un 40% por debajo de los máximos históricos de alrededor de los 20.000 dólares
En otros tokens digitales, el retroceso es también de doble dígito y se acumulan pérdidas de entre un 20 y un 30%. Destaca el ripple que se cambia en 1,26 dólares, con una nueva caída de un 31%. La moneda de cifrado más prometedora a inicios de enero ha borrado 100.000 millones de capitalización en unos pocos días.
El ethereum también pone tierra de por medio con su reciente máximo, cerca de los 1.400 dólares, y se cambia levemente por encima de los 1.000 dólares. La sangría se replica en las monedas más negociadas de este mercado, con rectificaciones similares en sus precios.
El acumulado de los 1.450 tokens del mercado a duras penas alcanzaba los 650.000 millones de dólares -el lunes superaba los 700.000 millones hasta poco antes de la media noche- en el arranque de la jornada del martes pero después de las noticias de que Corea del Sur aún contempla la prohibición total del comercio con criptodivisas, se ha hundido hasta los 543.000 millones de dólares, niveles en los que no se encontraba desde la corrección de la pasada Navidad. Después se ha recuperado rumbo a los 600.000 millones de dólares.
En una jornada en que se acumulan las informaciones sobre los movimientos de las principales autoridades del mundo frente el auge del mercado, Seúl ha vuelto a sembrar la alarma entre los inversores sobre la ley que prepara el país liderado por Moon Jae-in para prohibir el comercio con criptodivisas. El ministro de Finanzas surcoreano, Kim Dong-yeon, ha asegurado, en una estación de radio local que el Gobierno presentará una serie de medidas para reprimir la locura de la inversión en criptomonedas que ha calificado de "irracional".
Después de que el Gobierno haya enviado señales de que la normativa está lejos de ser aprobada, mientras ha incrementado la presión sobre las cuentas anónimas y ha dado de plazo a sus propietarios hasta finales de mes para identificarlas, estas nuevas decalraciones siembran el pesimismo.
BANCOS CENTRALES EN ASIA Y EUROPA VIGILANTES
Por otra parte, el Banco Central de Indonesia ha rechazado la legitimidad de los pagos con criptomonedas y que puedan usarse como monedas de curso legal en el país. Todavía en Asia, informaciones de 'Reuters' apuntan a que el Banco Popilar de China sigue buscando acabar con estos activos. Un artículo explica que los oficiales del supervisor han señalado que las autoridades deberían prohibir el comercio centralizado de monedas virtuales, así como de las personas y las empresas que brindan servicios relacionados.
En un comunicado interno que detalla los debates en una reunión de reguladores de Internet y otros responsables políticos la semana pasada, el vicegobernador del PBOC, Pan Gongsheng, dijo que el gobierno continuará ejerciendo presión sobre el comercio de divisas virtual y evitará la acumulación de riesgos en ese mercado.
El director del banco central de Alemania cree que el bitcoin debería regularse a través de un conjunto internacional de reglas en lugar de a escala nacional
En Europa, el supervisor monetario lituano ha hecho público un entorno de pruebas reglamentario para nuevas empresas que trabajan con blockchain. Anunciado la semana pasada, la iniciativa "LBChain" permitirá que el Banco de Lituania establezca una plataforma dedicada a la tecnología, a través de la cual las empresas pueden desarrollar servicios (aunque estos estarían sujetos a cierto control por parte de los funcionarios del banco central). Es un giro notable en la posición del regulador ya que permite a las instituciones capacitar a las empresas para probar productos financieros en un entorno limitado y bajo los auspicios de los reguladores.
Pero la noticia más relevante la protagoniza el Bundesbank. El director del banco central de Alemania cree que el bitcoin debería regularse a través de un conjunto internacional de reglas en lugar de a escala nacional. Joachim Wuermeling dijo que las criptomonedas sin fronteras son difíciles de controlar dentro de una región o país específico, según Reuters. Durante un evento en Fráncfort, el banquero dijo que las divisas de cifrado, en cambio, deberían ser supervisadas a escala global, con los reguladores armonizando sus reglamentaciones.
De popularizarse, la postura de Wuermeling sí importaría en el bitcoin y las ‘altcoins’, pero ha reconocido Wuermeling que tal estadio solo podría alcanzarse en caso de una mayor cooperación. Por lo pronto, como primer paso a esta supraregulación, el G-20 prepara un grupo de trabajo al que se unirá el equipo específico creado por el Tesoro de EEUU.