Musk también ha pedido que se vote en contra del acuerdo para extender la financiación
Cuando todo parecía indicar que el Congreso de EEUU había logrado evitar un cierre de Gobierno, el presidente electo, Donald Trump, lo ha echado por tierra al ordenar a los diputados republicanos que voten en contra del proyecto de ley para extender la financiación.
Junto al magnate, Elon Musk se ha erigido como otra de las voces que ha hecho descarrilar el acuerdo alcanzado el martes por la noche. En su perfil de la red social X, el CEO de Tesla, ha publicado que "todos los que voten por el acuerdo presupuestario deberían perder su escaño", así como que "el Congreso no debe aprobar leyes hasta el 20 de enero", momento en el que Trump tomará posesión de su cargo.
Precisamente, el presidente electo ha señalado a la cadena 'NBC News' que quiere que el techo de deuda se elimine. "Los demócratas han dicho que quieren eliminarlo. Si quieren deshacerse de él, yo lideraría la carga".
"Si los demócratas no cooperan en el techo de la deuda ahora, ¿qué hace pensar a alguien que lo harían en junio durante nuestra administración? Vamos a tener este debate ahora. Y deberíamos aprobar un proyecto de ley de gastos simplificado que no le dé a Chuck Schumer y a los demócratas todo lo que quieren".
En este sentido, Hakeem Jeffries, líder de los demócratas en el Congreso, ha dicho que "no van a subir el techo de la deuda para que los republicanos puedan recortar las pensiones". "Se ha ordenado a los republicanos de la Cámara de Representantes que cierren el gobierno. Y perjudican a la clase trabajadora estadounidense a la que dicen apoyar. Si rompes el acuerdo bipartidista, asumirás las consecuencias".
Ahora, los legisladores negocian a 'contrarreloj' para evitar el cierre de Gobierno, ya que la financiación expira este viernes, momento en que el Congreso suspenderá sus sesiones por las vacaciones de Navidad y Año Nuevo.
Cabe recordar que el proyecto de ley acordado entre demócratas y republicanos incluye 100.400 millones de dólares para fondos de ayuda en caso de desastres naturales, destinados a reparar los daños causados por los huracanes Helene y Milton en lugares como el oeste de Carolina del Norte y Florida.
También contempla 10.000 millones de dólares en asistencia económica para los agricultores, una extensión de un año de la ley agrícola y una disposición que reautorizará un programa del Departamento de Seguridad Nacional que permite a las agencias federales coordinar y contrarrestar las amenazas de los drones, dada la preocupación pública sobre los recientes avistamientos.