El optimismo alcanza su nivel más alto en seis meses, según el índice PMI de enero
La economía manufacturera de España comenzó el año 2019 con resultados positivos, registrando incrementos más fuertes de la producción, de los nuevos pedidos y del empleo. El optimismo, por su parte, alcanza el nivel más alto en seis meses, según el índice PMI de enero elaborado por la consultora Markit y publicado este viernes.
En enero, hubo informes de una demanda más firme del mercado nacional e internacional, que a su vez incitó a las empresas a reforzar sus inventarios de compras y productos terminados. Mientras tanto, las presiones de los precios permanecieron bajas, ya que los costes de los insumos aumentaron a la tasa más lenta en poco menos de dos años y medio y los precios cobrados apenas subieron.
El índice PMI de Markit del sector manufacturero español ajustado estacionalmente aumentó al 52,4 en enero desde el 51,1 de diciembre, cuando se registró el mínimo de 28 meses. De manera consistente con un sólido crecimiento mensual, el índice PMI se ha situado por encima del nivel de ausencia de cambios de 50 durante más de cinco años.
Los pedidos procedentes del exterior volvieron a crecer sólidamente, aunque a un ritmo ligeramente más débil que a finales de 2018
La encuesta de enero mostró incrementos sólidos tanto de la producción como de los nuevos pedidos. En ambos casos, el crecimiento se fortaleció de sus mínimas de casi dos años y medio de diciembre, en medio de informes de un fortalecimiento de la demanda, tanto a nivel nacional como en el extranjero. De hecho, los pedidos procedentes del exterior volvieron a crecer sólidamente, aunque a un ritmo ligeramente más débil que a finales de 2018.
No obstante, hubo divergencias importantes entre los grupos de mercado. Mientras que los fabricantes de bienes de consumo registraron fuertes incrementos tanto de la producción como de los nuevos pedidos, solo se observó un crecimiento moderado entre los productores de bienes intermedios. Por su parte, los fabricantes de bienes de capital registraron marcados y acelerados descensos en la producción, los nuevos pedidos y las ventas de exportación.
Puesto que la producción y los nuevos pedidos en general aumentaron en enero, un número de empresas optaron por aumentar su actividad de compras durante el mes. El crecimiento, aunque modesto, mejoró notablemente frente a la leve caída observada en diciembre del año pasado y ayudó a explicar un aumento marginal de las existencias de compras, que fue sólo el segundo en los últimos seis meses.
También se informó de un incremento de la contratación de personal que, a pesar de ser leve, fue el mejor registrado por el estudio desde agosto de 2018. El aumento de las plantillas ayudó a las empresas a enfocarse en las cargas de trabajo. Aunque se observó un aumento de los pedidos pendientes de realización, el ritmo de incremento fue sólo modesto.
La confianza sobre el futuro se fortaleció hasta su nivel más alto desde julio de 2018
Respecto a los precios, después de haberse debilitado notablemente en diciembre del año pasado, las presiones continuaron disminuyendo al comienzo de 2019. Aunque las empresas encuestadas mencionaron de nuevo que los precios energéticos, de los alimentos y de los metales aumentaron, los últimos datos indican que los costes subieron a la tasa más lenta desde agosto de 2016. Como resultado, los precios cobrados por los fabricantes españoles aumentaron sólo marginalmente en enero.
Finalmente, la confianza sobre el futuro se fortaleció hasta su nivel más alto desde julio de 2018. El lanzamiento de nuevas líneas de productos, la expansión planificada de las operaciones comerciales en nuevos mercados y la esperanza de una demanda generalmente más sólida deberían respaldar la actividad a lo largo de los próximos doce meses.
El director económico de Markit, Paul Smith, afirma que la economía manufacturera en España "se recuperó en parte de un diciembre decepcionante al registrar incrementos más fuertes tanto de la producción como de los nuevos pedidos". "Si bien los datos más recientes apuntan a una estabilización del sector tras un período prolongado de desaceleración, la naturaleza desequilibrada de la expansión en enero, más los continuos obstáculos que deben afrontar el comercio y el crecimiento mundial, sugieren que los riesgos a la baja para el comportamiento del sector continuarán a corto plazo".