La ministra destaca que en otros países del entorno ya existen este tipo de "regulaciones vanguardistas"
VITORIA, 8 (EUROPA PRESS)
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha pedido que se analice "con rigor" su propuesta de bajas flexibles porque "no supone un retroceso" en el derecho a la salud de los trabajadores, y ha señalado que pretende debatir "la posibilidad de unas altas graduales y la incorporación gradual al puesto de trabajo, si dan unas garantías de una mejor recuperación". Además, ha defendido que en los países del entorno ya existen este tipo de "regulaciones vanguardistas".
Saiz ha realizado estas declaraciones antes del encuentro que ha mantenido este martes por la tarde con la consejera de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico del Gobierno Vasco, Nerea Melgosa, en la sede del Ejecutivo autonómico en Vitoria-Gasteiz.
La ministra ha explicado que, con su propuesta, el Gobierno recoge "una cuestión que es absolutamente recurrente y que fue objeto de los pasados acuerdos de negociación colectiva y del reciente acuerdo en materia de pensiones".
En este sentido, ha apuntado que los países del entorno ya tienen regulaciones vanguardistas al respecto y que "la idea es ampliar derechos, poniendo en el centro la salud de los trabajadores y trabajadoras".
Asimismo, ha recalcado que siempre es un médico del servicio público el responsable de las altas y las bajas en este país, y ha argumentado que analizar la cobertura que da la prestación de la Seguridad Social de Incapacidad Temporal acompaña a las nuevas realidades y a las nuevas formas de trabajo.
"DERECHO IRRENUNCIABLE"
"Es un derecho irrenunciable por parte de las empresas que también deber de velar por la salud de los trabajadores. Se va a debatir la posibilidad de unas altas graduales y la incorporación gradual al puesto de trabajo, si dan unas garantías de una mejor recuperación", ha ampliado.
Elma Saiz ha invitado a la colaboración en el debate dentro de la mesa de diálogo social, "donde toda la sociedad puede participar, la patronal y los sindicatos, además de grupos expertos y, por supuesto, otros ministerios, quienes pueden hacer sus aportaciones". "Este es el lugar", ha incidido.
A su juicio, "se ha dado el pistoletazo de salida a esa convocatoria del diálogo social para que tenga lugar este debate y se analicen desde un punto de vista técnico y con rigor las diferentes propuestas que puedan surgir, sin olvidar ese derecho irrenunciable a la salud de los trabajadores".
"Estamos hablando de ampliar y extender estos derechos de los trabajadores y trabajadoras, en ningún caso de ningún paso atrás, sino todo lo contrario. Extender y abrir ese abanico de posibilidades siempre desde la supervisión médica, que es quien tiene la última palabra en todo lo que tiene que ver con las altas médicas", ha explicado.