Advierte de que la economía, a escala global, podría tener una menor capacidad para absorber estas perturbaciones
MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
El director general de Economía del Banco de España, Ángel Gavilán, ha advertido este viernes de que algunas dinámicas recientes sugieren que, de cara al futuro, las perturbaciones de oferta sobre la actividad económica podrían ser más frecuentes y persistentes que en las últimas décadas.
Según ha explicado Gavilán durante su intervención en la Cátedra Germán Bernácer, de Alicante, esta mayor frecuencia de las perturbaciones de oferta estarían relacionadas, por ejemplo, con el cambio climático, los avances tecnológicos y los conflictos geopolíticos.
"La economía, a escala global, podría tener una menor capacidad para absorberlas", ha avisado Gavilán, tras apuntar que esto supondrá un reto para la política monetaria, que deberá profundizar en el análisis de la naturaleza y grado de persistencia de las perturbaciones, y ponderar el "trade-off" que existe entre actividad e inflación cuando se materializan shocks de oferta.
El director general del Banco de España ha recordado que el Eurosistema está trabajando en una nueva revisión de su estrategia de política monetaria, tras la finalizada en 2021, que se anunciará a mediados de 2025 y que mantendrá el objetivo de inflación simétrico del 2% a medio plazo.
Gavilán ha asegurado que, por el momento, parece que se está produciendo un proceso de desinflación "inmaculado" o de "aterrizaje suave" en el que, a escala global, está siendo posible conciliar una reducción relativamente rápida de las tasas de inflación con el mantenimiento de un cierto dinamismo de la actividad económica y de un notable vigor en los mercados de trabajo.
A la luz de estas dinámicas de actividad e inflación, los principales bancos centrales mundiales comenzaron hace unos meses a reducir sus tipos de interés oficiales si bien estos se mantienen aún cerca de sus máximos recientes y en terreno restrictivo.
Según Gavilán, los mercados financieros anticipan que los tipos de interés oficiales seguirán disminuyendo en los próximos trimestres aunque estos permanecerían, en el medio plazo, por encima de los niveles registrados antes del comienzo de la pandemia.
En todo caso, el director general ha reconocido que, en una coyuntura aún muy incierta, las próximas decisiones de política monetaria del banco central europeo seguirán siendo dependientes de los datos.
Por un lado, ha advertido de que la actividad económica en el área del euro aún muestra signos de debilidad, al tiempo que los últimos datos de inflación han tendido a sorprender a la baja. Por otro lado, ha señalado que la inflación de los servicios y las presiones inflacionistas domésticas siguen siendo elevadas en la región, y aún persiste una considerable incertidumbre en cuanto al comportamiento futuro de márgenes empresariales y salarios.