Las causas de la protesta son los excesivos costes, la competencia desleal y las condiciones laborales
El paro indefinido de los transportistas de mercancías como protesta por el precio del combustible desde hace meses que ahora alcanza su pico a causa del conflicto entre Ucrania y Rusia, está provocando un desabastecimiento general en el país y unas pérdidas en el sector de la alimentación que ascienden a más de 600 millones de euros en una semana.
La protesta está en marcha desde el pasado 14 de marzo promovida por la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional. Los afectados piden soluciones ante la situación que vive su sector y, Miguel Ángel Piqueras García, director del Grado en Ingeniería en Organización Industrial de Universidad Internacional de Valencia (VIU), señala las causas principales: excesivos costes, competencia desleal, condiciones laborales y representatividad.
De forma más específica, afirma, que los tres puntos mínimos que precisarían un acuerdo para cesar el paro son "la prohibición del transporte por debajo de costes de explotación, jubilación de conductores a los 60 años como máximo y establecimiento de un convenio colectivo estatal y único".
El conflicto se ha enconado ya que la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, no considera interlocutor válido a la Plataforma impulsora de las protestas, ha anunciado que algunas reivindicaciones son inasumibles por no cumplir la normativa europea y que las peticiones alcanzables se analizarán con el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC). Para la ministra, las medidas de apoyo al sector se deben integrar en el Plan Nacional de Respuesta al Impacto de la Guerra, que se aprobará el próximo 29 de marzo.
El colectivo convocante exige medidas concretas y de carácter muy urgente, aduciendo que el sector del transporte no puede soportar durante dos semanas más el nivel de precios de los carburantes, que no cesa de ascender y para el que no se atisba un techo.
SEGUIR LOS PASOS DE OTROS PAÍSES EUROPEOS
"Es innegable que este paro en el transporte por carretera está provocando graves problemas de suministro de materias primas y componentes para los distintos sectores de actividad industrial, así como el desabastecimiento en las cadenas de suministro y las plataformas logísticas que no solamente están asociadas a la alimentación y la bebida, sino a otros muchos productos, como medicamentos en farmacias", señala Piqueras García.
Para el profesor de la VIU, puesto que la coyuntura actual no es muy halagüeña, "sería deseable redoblar la actitud de diálogo por parte de los agentes involucrados para que se alcance una solución a corto plazo, preferiblemente imponiendo medidas como las de algunos países de nuestro entorno europeo (Francia, Irlanda, Polonia), que han tomado la iniciativa reduciendo la fiscalidad en los combustibles". De otro modo, "nuestra economía irá acumulando pérdidas que a nadie benefician, al mismo tiempo que la escasez o falta de existencias se generaliza a más productos de la cesta de la compra a medida que transcurren las jornadas de paro", avisa Piqueras García.