Las expectativas sobre el futuro del país son tres veces más optimistas que hace justo un año
La economía alemana alcanzará más fuerte el mes de abril. Así lo muestra el índice sobre la confianza de los consumidores alemanes desarrollado por la consultora de mercado GfK, que sube su puntuación a 10,9 tras el resultado de 10,8 puntos de febrero. "El optimismo de los consumidores se mantiene muy elevad" señalan los autores de esta encuesta, apuntando que la inestabilidad política reciente del país no tuvo un impacto serio sobre la confianza.
En cuanto a las expectativas económicas, después de la fuerte corrección experimentada en febrero, el dato de marzo ha registrado una subida de tres décimas, hasta 45,9 puntos, en contraste con los 18,1 puntos de un año antes. Las previsiones para el futuro del país son por tanto excelentes. "La economía alemana actualmente funciona a todo gas", destacan desde GfK, señalando que los consumidores confían en que la situación "será así los próximos meses ante la "excelente" evolución del mercado laboral, que este año volverá a generar alrededor de medio millón de puestos de trabajo y reducirá el nivel de paro.
Así, los consumidores alemanes se muestran optimistas respecto de la evolución de sus ingresos, cuyo indicador mejora en marzo a 54,9 puntos desde los 53,8 de febrero, frente a los 43,4 del mismo mes de 2017. Asimismo, la fuerte demanda de trabajadores en varios sectores de la economía alemana ofrece condiciones para subidas salariales, mientras las pensiones subirán un 3%, lo que, teniendo en cuenta la evolución de la inflación, apunta a que trabajadores y pensionistas ganarán poder adquisitivo.
La intención de compra también se encuentra en alza, con un crecimiento de 2,8 puntos tras la caída de 4,1 puntos registrada en febrero, hasta situarse en los 59,1 puntos, cuatro unidades por encima del resultado del mismo periodo del pasado ejercicio.