Para 2025, la agencia espera un déficit presupuestario de alrededor del 3,0% del PIB
Tras la crisis provocada por la DANA, España podría superar el objetivo de un déficit presupuestario inferior al 3% del PIB en 2024, según Scope Ratings, que revisa el déficit presupuestario de España al alza hasta aproximadamente el 3,5% del PIB, frente al 2,8% proyectado anteriormente. Esta revisión se debe al apoyo gubernamental directo a los hogares y empresas afectadas por la crisis, además de medidas como la suspensión de contribuciones a la Seguridad Social, entre otras.
Esto equilibra un crecimiento superior al esperado con el mayor gasto fiscal para abordar la crisis de la DANA, reconociendo que algunas medidas no tendrán impacto en el presupuesto, como el alivio hipotecario extendido y las garantías de préstamos, indica Scope. En este sentido, estima que el apoyo presupuestario neutral ascenderá a alrededor del 0,25% del PIB. Para 2025, Scope espera un déficit presupuestario de alrededor del 3,0% del PIB, frente a la estimación anterior del 2,3%.
En cuanto a la financiación, la agencia no espera cambios significativos en el plan en un futuro próximo. "La estrategia de deuda de España suele incluir colchones conservadores que le permiten absorber costes inesperados con una desviación mínima de la financiación planificada. España mantiene un colchón de efectivo, lo que brinda flexibilidad para cubrir necesidades a corto plazo sin nuevas emisiones de deuda pública inmediatas", señala en un comunicado envidado este viernes.
Además, indica que España es uno de los principales beneficiarios de los fondos de recuperación NextGenerationEU de la UE, y que esta fuente de financiación externa puede ayudar a cubrir algunos costes de reconstrucción sin aumentar la deuda nacional. "También hay que tener en cuenta que la Comisión Europea ha mostrado indulgencia hacia los estados con mayores déficits debido a circunstancias excepcionales, especialmente para el gasto relacionado con la crisis", apunta Scope.
En el ámbito económico, la región de Valencia tiene un peso importante dentro de la economía española, representando el 9,4% del PIB nacional, pero no hay sectores específicos en la región que pongan en riesgo la economía nacional en su conjunto. Por tanto, se espera que el impacto sobre el PIB nacional sea limitado, apunta Scope.
Las principales dificultades para la recuperación incluyen la infraestructura dañada, el acceso restringido a servicios esenciales (como electricidad, gas y agua), y la disponibilidad reducida de bienes intermedios, lo que retrasa las actividades comerciales.
"El desastre puede impulsar la inflación localizada en Valencia, con algunas repercusiones nacionales en áreas específicas vulnerables a los aumentos de precios, incluidas viviendas y reparaciones, y reemplazo de vehículos. El efecto inflacionario estimado podría incrementar los precios nacionales en algunas décimas en 2025 debido a una mayor demanda de bienes y servicios vinculados a la recuperación", concluye la agencia de rating.