"Ya nadie se cuestiona la necesidad de asegurar el alquiler y la demanda se ha generalizado"
El Covid está instaurando nuevas costumbres en todos los ámbitos. Hasta en los acuerdos de alquiler, donde cada vez es más frecuente incorporar seguros de impago. Tanto es así que más del 50% de los nuevos contratos firmados ya los contemplan y la previsión es que este porcentaje aumente al 60% a finales de año, según los cálculos realizados por la correduría de seguros Arrenta.
Antes de la pandemia, este tipo de pólizas era más habitual en zonas más urbanas, pero ahora se está expandiendo a todo el territorio nacional y tipo de inmuebles. "Ya nadie se cuestiona la necesidad de asegurar el alquiler y la demanda se ha generalizado", apunta la directora general de Arrenta, Mercedes Robles.
Uno de los principales motivos del auge de estos seguros es el miedo a los impagos que la crisis del Covid ha generado entre los caseros. Y no es un temor infundado, ya que, como contó 'Bolsamanía', las aseguradoras registraron alrededor de 300 incidencias diarias por este motivo durante la última fase del confinamiento, teniendo que compensar económicamente a los propietarios que no han percibido la renta acordada por el arrendamiento de un inmueble.
Estos seguros se hacen cargo de las cuotas vencidas y, eventualmente, cubren los pagos de la renta durante los 8 o 10 meses que puedan ser necesarios para expulsar al inquilino por la vía judicial. Así, el arrendador está protegido sin la necesidad de un avalista.
Para el inquilino, estas pólizas le suponen un ahorro frente al requerimiento de meses de fianza, que en muchas ocasiones multiplican por tres o más veces la renta mensual que se pide por el inmueble. Además, son más económicos que un aval bancario.
Aunque los propietarios de las viviendas deben tener cuidado porque también han proliferado las pólizas falsas, lo que supone un riesgo final de impago pese a haber contratado el seguro. Por este motivo, es esencial comprobar que han obtenido el reconocimiento de la Dirección General de Seguros.
La crisis del Covid está favoreciendo al mercado del alquiler, en detrimento de la compra de vivienda. De hecho, "mantiene la buena salud como uno de los productos financieros con un mayor ratio de rentabilidad para los inversores", según apuntan desde Arrenta.
La previsión es que se mantenga la tendencia a la baja del precio de los arrendamientos, porque aunque la demanda del alquiler se mantiene, el aumento de la oferta es muy alto. En concreto, el parque de vivienda en alquiler ha aumentado notablemente por la transformación de pisos turísticos a alquiler tradicional y un trasvase desde el mercado de la venta.