Se espera que la ronda no llegue a buen puerto y sea rechazada por la mayoría republicana
La Cámara de Representantes de EEUU aprobó la pasada noche un paquete de estímulos por 2,2 billones de dólares. Esta intentona por regar a la mayor economía del mundo ha nacido muerta, puesto que se prevé que el Senado, de mayoría republicana, vote en contra.
Nancy Pelosi, demócrata y presidenta de la Cámara, sigue confiando en alcanzar un acuerdo con los republicanos antes de las elecciones.
Los republicanos, por su lado, presentaron una contraoferta este jueves: 1,5 billones de dólares. El jefe de gabinete de Donald Trump llegó a afirmar ante la prensa que "cualquier estímulo que empiece por un 2... va a ser un problema". Las bolsas y mercados siguen pendientes de esta nueva ronda, destinada a impulsarlos cuando más lo necesitan.
El divorcio entre ambos bandos se remonta al pasado 7 de agosto, fecha en la que las negociaciones encallaron. Desde entonces, han intentado reconducirlas y tanto el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, como la propia Pelosi están manteniendo conversaciones telefónicas para sacarlo adelante.