El presidente del BCE sólo da respuesta a la cuestión de los bonos griegos: no son elegibles para el QE
Sin cambios. Como era ampliamente esperado por el consenso de mercado, el Banco Central Europeo (BCE) ha mantenido estables los tipos de interés de referencia al 0% en su reunión del mes de julio y ha reiterado su compromiso de finiquitar las operaciones de compras de bonos en diciembre de 2018 "siempre que los datos confirmen las perspectivas de inflación a medio plazo".
De este modo, en una reunión que se preveía tranquila después de las decisiones alcanzadas en junio, la tasa de interés en las operaciones de refinanciación de la entidad se mantiene en el mínimo histórico en el que permanece estable desde marzo de 2016. El tipo aplicado a la facilidad de préstamo continuará en el 0,25% y el interés de la facilidad de depósito seguirá en el -0,40%.
La reunión del mes pasado del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) aportó mucha información y dibujó la estrategia de salida del banco central de su política ultra-expansiva: fin de las compras en diciembre de 2018 y primera subida de tipos en la segunda mitad de 2019. Por lo tanto, no se esperaban "anuncios importantes en la cita de julio", tal y como apuntaba Frank Dixmier, analista de Allianz GI.
Y así ha sido. En un comunicado que se ciñe al emitido en la reunión anterior, el banco central ha señalado que prevé que los tipos de interés oficiales del BCE "se mantengan en sus niveles actuales durante el tiempo necesario para asegurar la continuación de la convergencia sostenida de la inflación hacia niveles inferiores, aunque próximos, al 2% a medio plazo".
En cuanto a los estímulos cuantitativos, redunda en lo ya expuesto: seguirán al ritmo de 30.000 millones de euros hasta septiembre, cuando pasarán a reducirse a 15.000 millones de euros hasta el último mes de 2018, cuando se prevé que finalicen.
DRAGHI BRILLA POCO
Con todo, los inversores han seguido con mucha atención la rueda de prensa del presidente del BCE, Mario Draghi, de quien esperaban más concreción sobre la perspectiva de que los tipos se mantendrán sin cambios, al menos hasta "verano de 2019".
Sin embargo, Draghi ha brillado poco en una comparecencia en línea con las expectativas del mercado, de la que se esperaba más bien poco, por no decir nada. Así, de las tres preguntas que planeaban sobre los anuncios de junio, el banquero central no se ha movido un ápice de la sentencia sobre los tipos y ha reiterado que se mantendrán en el mínimo histórico del 0% hasta "al menos durante el verano de 2019".
Sobre la política de reinversiones ha dicho en varias ocasiones que "aún no se ha empezado a discutir", aunque ha anticipado que la clave es "el capital". Y sí ha dado respuesta a una de las tres preguntas que planeaban sobre esta reunión de julio cuando ha sentenciado que los bonos griegos no son elegibles "ahora mismo" para el 'QE'.