Las islas mantienen actualmente "negociaciones bilaterales" con España
Uno de los interrogantes ya tiene respuesta. Tanto Michel Barnier como David Davis lo han confirmado este lunes en Bruselas: Gibraltar abandonará junto con el resto de Reino Unido la Unión Europea. Según el representante europeo en las negociaciones, el Gobierno español "cuenta con la solidaridad total" de los demás miembros del bloque, en sus decisiones tras la salida efectiva del Peñón en marzo de 2019. Por su parte, Davis explicó que actualmente se mantienen "negociaciones bilaterales" con España sobre Gibraltar, de las que espera un resultado positivo para ambos bandos.
Con una población de 33.000 personas, la región se ha mantenido en manos británicas desde 1713, con actualmente 8.000 españoles cruzando la frontera a diario para trabajar en Gibraltar. Una situación que se complicará bajo el nuevo marco regulatorio ajeno a la UE. Un informe del Real Instituto Elcano mostró un deseo abrumador de los gibraltareños de permanecer en el bloque europeo, pero no bajo la nacionalización del Peñón. Una situación que parece que no se cumplirá tras lo acontecido este lunes en Bruselas.
El empleo de 8.000 ciudadanos, que a diario cruzan la frontera para trabajar, podría estar condicionado al acuerdo sobre la relación del Peñón con España
La comparecencia se ha producido tras una sesión de negociaciones que inaugura una semana crucial para el Brexit. En ella, además de lo relativo al Peñón, ambos representantes confirmaron el acuerdo sobre los límites del periodo de transición tras la salida de Reino Unido, que se extenderá hasta los dos años. De este modo, el territorio continuará bajo el paraguas del más alto tribunal europeo hasta finales de 2020, sin capacidad de decisión sobre el futuro del bloque. Este mismo periodo bianual se aplicará sobre Gibraltar.
"Tenemos certeza de los términos que se aplicarán nada más se produzca la salida. Las empresas no deberán retrasar o acelerar sus decisiones de inversión en base a suposiciones sobre el acuerdo futuro. Esto significa que podrán continuar operando e invirtiendo con confianza, con una mayor claridad sobre nuestra relación futura. Y esto es cierto a lo largo de todo el Reino Unido, incluyendo Gibraltar", apuntó Davis.
LA DECISIÓN, EN MANOS DE ESPAÑA
Este primer borrador sobre el divorcio está supeditado a la opinión de la Administración española. La UE ha mantenido su postura sobre no certificar ninguna posición frente a la región sin un previo entendimiento entre el Gobierno de Mariano Rajoy y la primera ministra británica Theresa May. "Deseo que esta discusión sea positiva y, por lo que sé, ambos lados de la negociación están avanzando", ha explicado Barnier durante su comparecencia en Bruselas. Unas conversaciones que se centran en el posible uso compartido del aeropuerto de Gibraltar y las restricciones a los beneficios fiscales que el gobierno de la región fomenta para atraer nuevas empresas.