El sector manufacturero alemán registra su peor momento de los últimos dos años
La producción industrial de Alemania descendió un 4,7% en noviembre en comparación con el mismo mes del año anterior, mientras que cayó un 1,9% frente a octubre, según los datos provisionales publicados este martes por la Oficina Federal de Estadística (Destatis) en función de los precios, según la temporada y el calendario. Los expertos creen que el país "podría estar cayendo en una recesión técnica".
Por su parte, los datos revisados de octubre confirman que la producción de la industria alemana bajó un 0,8% respecto a septiembre, mientras que aumentó un 0,5% en comparación con octubre de 2017.
Estos datos sugieren "que el país podría estar cayendo en una recesión técnica"
En concreto, en noviembre de 2018, la producción en la industria excluyendo la energía y la construcción disminuyó un 1,8%. Dentro de la industria, la producción de bienes de capital disminuyó un 1,8% y la producción de bienes intermedios un 1%, mientras que la producción de bienes de consumo disminuyó un 4,1%.
Fuera de la industria, la producción de energía disminuyó un 3,1% en noviembre y la producción en construcción descendió un 1,7%.
Estos datos sugieren, según los analistas de Spreadex, "que el país podría estar cayendo en una recesión técnica". Es más, el sector manufacturero alemán registra su peor momento de los últimos dos años. "Es el peor registro de este indicador desde el mes de diciembre del año 2016 y ha pillado completamente por sorpresa a inversores y analistas, que esperaban un avance del 0,3%", apuntan desde IG.
Estos malos resultados del sector se suman a los publicados el lunes de la caída del 1% de los pedidos a fábrica en el mismo mes de noviembre. "Dado el gran peso específico que tiene el sector secundario en el crecimiento económico de Alemania, el mercado comienza a descontar ya la posibilidad de que el Producto Interior Bruto (PIB) del país pueda volver a registrar números rojos en el cuarto trimestre de 2018", con lo que "Alemania se expone a entrar en recesión por primera vez desde 2009", añade.
Tras finalizar el tercer trimestre con un retroceso del 0,2%, la economía germana se expone a la posibilidad de encadenar otros tres meses de crecimiento negativo, lo que técnicamente supondría entrar en recesión al encadenar dos trimestres consecutivos en números rojos. De consumarse este escenario negativo, sería la primera vez que Alemania entre en recesión en los últimos diez años. La última vez que el país registró más de un trimestre en negativo fue en el último cuarto de 2008 y el primero de 2009 y, desde entonces, nunca ha registrado crecimientos negativos durante más de tres meses, explica IG.