Frente a las expectativas del consenso de analistas que apuntaban a un aumento de 15.000 parados
La cifra de desempleados en Alemania disminuyó en 13.000 personas el pasado mes de diciembre, frente a las expectativas del consenso de analistas que apuntaban a un aumento de 15.000 parados, en línea con noviembre, según los datos ajustados estacionalmente de la Oficina Federal de Empleo.
La bajada del número de desempleados en Alemania desafía así los temores al impacto de la recesión en la 'locomotora europea' y deja vía libre al Banco Central Europeo (BCE) en el endurecimiento de su política monetaria para controlar la inflación.
De este modo, la tasa de paro de Alemania se mantuvo al cierre de 2022 en el 5,5% por quinto mes consecutivo.
"La actual mejora en los indicadores de confianza sugiere queque la recesión económica podría ser más leve de lo esperado inicialmente", ha señalado la Oficina en su informe mensual, donde ha reconocido que, a pesar de que el mercado laboral se mantuvo sólido al final del año, "los efectos de la tensa situación económica fueron notorios".
De su lado, la Oficina Federal de Estadística (Destatis) ha informado de que en noviembre el número de ocupados en Alemania era de unos 45,9 millones de personas, lo que implicaría un incremento de 45.000 ocupados respecto de octubre en datos ajustados.
Según los resultados de la encuesta de población activa, 1,25 millones de personas estaban desempleadas en noviembre de 2022. Eso supuso una disminución de 132.000 desempleados, o un 9,5 %, en comparación con noviembre de 2021. Corregido de efectos estacionales, el número de parados se situó en 1,32 millones, algo menos que en octubre de 2022.
En sus últimas previsiones macroeconómicas, el Bundesbank, el banco central de Alemania, había revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento para los próximos años, incluyendo una contracción del PIB del 0,5% en 2023, mientras que aumentó sus expectativas de inflación, que este año alcanzará el 7,2%.
En concreto, el banco central de Alemania ahora espera que el PIB de la 'locomotora europea' registre una contracción del 0,5% en 2023 y después rebote un 1,7% en 2024 y un 1,4% en 2025.
En cuanto a la evolución de los precios, el Bundesbank prevé que la tasa de inflación armonizada se situará en el 7,2% en 2023 y el 4,1% en 2024, mientras que para 2025 anticipa que los precios subirán un 2,8%, aún muy por encima del objetivo de estabilidad del BCE.