Las cifras de inflación en Europa y la actividad de las fábricas chinas, bajo la lupa
El euro sigue perdiendo fuerza frente al dólar estadounidense (-0,47%, 1,0682 dólares). La moneda comunitaria ha tocado mínimos de los últimos dos meses, concretamente desde el 20 de marzo, después de que una serie de datos macroeconómicos desfavorables.
Por un lado, los datos de inflación en Francia y Alemania han mostrado que la inflación se está ralentizando rápidamente en el Viejo Continente. Según los analistas, estas cifras reducen la presión sobre el Banco Central Europeo (BCE) para que siga subiendo los tipos de interés, lo que disminuye el atractivo del euro frente al ‘billete verde’.
En el caso del país vecino, la subida de precios en Francia se moderó ocho décimas en mayo, hasta el 5,1% en tasa interanual, su nivel más bajo en el último año. Los precios de la energía, uno de los principales catalizadores de estas subidas, han subido un 2% frente al alza del 6,8% interanual de abril. En el caso de la inflación armonizada, empleada por Eurostat en sus estadísticas, la tasa interanual de Francia en mayo ha bajado al 6% desde el 6,9% del mes anterior.
Por su parte, se espera que el IPC germano ha caído hasta el 6,1% en mayo frente al 6,5% esperado y el 7,2% del mes anterior. En el caso de la tasa armonizada se ha desplomado hasta el 6,3% desde el 6,8% estimado por el consenso y el 7,6% registrado en abril. A su vez, la inflación española se desaceleró más de lo previsto en el quinto mes de 2023.
“La inflación europea está retrocediendo ahora y se están retirando algunas de las subidas previstas anteriormente por el BCE”, ha apuntado Carl Hammer, estratega jefe del banco europeo SEB. Asimismo, este experto cree que la probable resolución del techo de la deuda de EEUU estaba apoyando al mercado estadounidense y, en última instancia, dando un apoyo adicional al dólar.
El analista de ING, Francesco Pesole, señala que, dado que los mercados prevén dos subidas más de los tipos de interés del Banco Central Europeo antes de septiembre, por lo que el euro es vulnerable a una rebaja de las expectativas en caso de que la inflación se ralentice más rápido de lo esperado. En su opinión, el EUR/USD podría probar pronto el nivel de 1,0600.
Por su parte, el equipo de Rabobank destaca que los datos de EEUU muestran que los responsables de la política monetaria de la Reserva Federal (Fed) no pueden permitirse el lujo de relajarse.
“La parte delantera de la curva del Tesoro se ha mantenido sensible a la especulación sobre la posibilidad de un nuevo endurecimiento de la Fed, si no en junio, potencialmente en julio. Además, seguimos pensando que la Fed no bajará los tipos hasta 2024”, sentencian. En este sentido, señalan que la última lectura del deflactor PCE sirvió para respaldar la opinión de "más altos durante más tiempo" sobre los tipos de la Reserva Federal”.
ASIA TAMPOCO AYUDA
Por otra parte, los datos económicos de China también han echado una mano al ‘billete verde’. El índice manufacturero del gigante asiático se situó en mayo en 48,8 puntos, por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción, y por debajo de la estimación de 49,4 del consenso de economistas. Se trata del segundo mes consecutivo de descensos del PMI manufacturero, tras la contracción del 49,2 registrada en abril, y se ha producido ante la debilidad de la demanda.
Los expertos de Pantheon Macroeconomics afirman, a raíz de estos datos, que “la recuperación china se tambalea, sobre todo en el sector industrial, ya que China ha decidido permitir que el repunte del consumo sea el principal motor de la reactivación, al tiempo que se abstiene de aplicar estímulos amplios”.
Estos datos pesaron sobre los dólares australiano y neozelandés, dos componentes del índice del dólar. El dólar australiano cayó a su nivel más bajo desde mediados de noviembre, a 0,648 dólares. Por su parte, el yuan chino también cayó a su nivel más bajo desde noviembre, a 7,129 por dólar.
“En igualdad de condiciones, la debilidad de China es positiva para el dólar estadounidense y, en cierta medida, para el yen frente al euro o el australiano”, destaca Shusuke Yamada, estratega jefe de tipos y divisas de Bank of America (BofA) en Tokio.