La economía rusa se somete a una "transformación estructural a gran escala", afirma el banco central
El Banco Central de Rusia (BCR) ha decidido mantener sin cambios su política monetaria y su tipo de interés principal en el 20%, pero ha advertido de una considerable incertidumbre mientras la economía se somete a una "transformación estructural a gran escala".
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A finales de febrero, poco después de que las fuerzas rusas invadieran Ucrania, el BCR duplicó con creces el tipo de interés clave del país, que pasó del 9,5% al 20%, en un esfuerzo por apuntalar la caída de su moneda y mitigar el impacto de las duras sanciones internacionales.
En su comunicado del viernes, el banco central dijo que el fuerte aumento de su tipo clave había "ayudado a mantener la estabilidad financiera".
"La economía rusa está entrando en la fase de una transformación estructural a gran escala, que irá acompañada de un período temporal pero inevitable de aumento de la inflación, relacionado principalmente con los ajustes de los precios relativos en una amplia gama de bienes y servicios", dijo.
"La política monetaria del Banco de Rusia está preparada para permitir una adaptación gradual de la economía a las nuevas condiciones y un retorno de la inflación anual al 4% en 2024".
El rublo se hundió hasta mínimos históricos frente al dólar por el aluvión de nuevas sanciones y penalizaciones impuestas a Moscú por Estados Unidos y sus aliados europeos, antes de moderarse en las últimas semanas. La divisa se situó en poco más de 103 por dólar tras la decisión del viernes.
A principios de esta semana, Rusia consiguió evitar un impago histórico de su deuda al completar algunos de los pagos de sus bonos soberanos en dólares, según informó 'Reuters'. El Ministerio de Finanzas ruso dijo el viernes que había cumplido con sus obligaciones de pagar los cupones de los eurobonos denominados en dólares en su totalidad.
Las grandes cantidades de reservas de divisas del BCR fueron objeto de sanciones occidentales que pretendían hacerlas casi inaccesibles, impidiendo a los responsables políticos mitigar la depreciación de los activos nacionales.