La entidad cántabra ha bajado con fuerza tras una reacción inicial alcista a sus cifras
Después de las abultadas caídas de la pasada jornada en las bolsas europeas, los principales índices del Viejo Continente han intentado rebotar, aunque no lo han conseguido. El Ibex 35 ha llegado a marcar un máximo intradía en 8.703 puntos, pero ha cerrado con caídas del 1,58%, hasta 8.439,30 puntos, presionado por las fuertes caídas en Santander tras sus resultados, sin olvidar el desplome en PharmaMar. En el lado positivo del selectivo, han destacado las alzas en Meliá, Ferrovial y ACS.
La jornada ha estado plagada de protagonistas con nombre propio, pero se ha hablado sobre todo de Twitter, tras llegar a una acuerdo de venta con Elon Musk por 44.000 millones de dólares, y de Santander, que ha anunciado una mejora de su beneficio del primer trimestre del 58%, hasta los 2.543 millones de euros. El banco ha tenido un comportamiento en bolsa muy volátil hoy, ya que esta mañana ha llegado a subir más de un 3% tras anunciar sus cifras, pero luego se ha desplomado.
Según UBS, el 'culpable' para explicar la mala reacción posterior en bolsa es Brasil, país donde se tenían muy buenas perspectivas por el buen comportamiento del real brasileño, pero que ha decepcionado por la subida de costes y la desaceleración del negocio.
El banco suizo ha mostrado su "decepción" por la evolución del margen neto de intereses en el mercado brasileño, los menores márgenes y los volúmenes más reducidos. Al mismo tiempo, los costes se han disparado un 14% frente al primer trimestre de 2021.
Twitter y Santander no han sido, sin embargo, los únicos protagonistas. Este martes han publicado resultados otras muchas compañías, como HSBC, Novartis, AB Foods, Enagás (ganó un 25,4% menos a marzo)... el propio UBS también ha presentado cifras, superando las expectativas para el primer trimestre. La firma helvética registró un beneficio neto atribuible de 2.136 millones de dólares. Sin embargo, las cuentas más esperadas llegarán al cierre de Wall Street, que registra fuertes pérdidas y ha contribuido al mal cierre de Europa. El sector tecnológico sigue liderando las pérdidas y el Nasdaq cotiza ya cerca de mínimos anuales, a la espera de los resultados de Microsoft y Alphabet.
La avalancha de cifras empresariales ha sido uno de los asuntos principales del día, pero los inversores han seguido muy pendientes de otros, como la situación que se está viviendo en China con el Covid y que fue la causante, en buena medida, de los descensos que se vieron ayer en las plazas del Viejo Continente.
"La estricta política china de 'Covid cero' hace temer que el Gobierno chino tenga dificultades para acercarse a su objetivo del 5,5% del PIB este año. (...) Podríamos ver bloqueos que duren semanas. Son estas preocupaciones las que parecen haber impulsado el movimiento a la baja de ayer, junto con una fuerte caída de los precios de las materias primas", explican los expertos de CMC Markets en su informe diario.
La agenda de este martes ha venido bastante escasa de datos macro a la espera de que el jueves se publique el PIB de Estados Unidos y el viernes se conozcan el PIB y el IPC de la eurozona. Mientras que esta semana estará marcada por los resultados, en la próxima pasarán a escena los bancos centrales, con la esperadísima reunión de la Reserva Federal (Fed) y también del Banco de Inglaterra.
Por si esto fuera poco, Rusia sigue redoblando su ofensiva sobre el Donbás y los expertos de Danske Bank anticipan que la guerra cobrará aún más intensidad en las próximas semanas, conforme se acerca el 9 de mayo, día en el que Rusia celebrará su victoria sobre Alemania en la Segunda Guerra Mundial.
El euro se cambia a 1,0667 dólares (-0,41%) y renueva sus mínimos de dos años frente al billete verde. El petróleo repunta un 1%. El Brent se sitúa en 103,57 dólares y el West Texas en 99,74 dólares.
El oro avanza un 0,6% (1.907 dólares) y la plata cede un 0,1% (23,66 dólares).
El bitcoin baja un 1% (39.785 dólares) y el ethereum baja un 1,8% (2.942 dólares).
La rentabilidad del bono americano a 10 años baja hasta el 2,761% y el rendimiento del bono español a 10 años se relaja hasta el 1,806%.