Minaron 722 bitcocins en el período, casi 60 menos que en el trimestre anterior
La minera de bitcoin (BTC) Iris Energy cerró 2022 registrando una pérdida neta de 144 millones de dólares en el último trimestre de 2022 (segundo trimestre fiscal de la compañía). Esta pérdida, señalan, responde a un cargo no monetario por deterioro de valor de 105,2 millones de dólares, en parte relacionado con la financiación de su equipo
“2022 fue un año difícil para el sector de los activos digitales. A pesar de estos desafíos, ampliamos la capacidad de nuestro centro de datos en Columbia Británica (Canadá) en más de 5 veces hasta 160MW en tres sitios. También nos complace haber anunciado que hemos llegado a un acuerdo para utilizar nuestros prepagos restantes de Bitmain para adquirir nuevos mineros sin ningún desembolso adicional de efectivo y, al hacerlo, aumentaremos nuestra capacidad de autominería de 2,0 EH/s1 a 5,5 EH/s”, ha señalado Daniel Roberts, cofundador y co-CEO de Iris Energy. De cara al futuro, ha destacado Roberts, “creemos que estamos bien posicionados para capitalizar a medida que los mercados sigan mejorando”.
La empresa registró unos ingresos de 13,8 millones de dólares, superando la estimación media de 13,3 millones de dólares de los analistas recopilada por FactSet. Con todo, supuso una caída de las ventas en comparación con los 16,2 millones de dólares del primer trimestre del ejercicio fiscal 2023, debido principalmente a la reducción del número de bitcoin minados y al descenso del precio de la criptomoneda reina.
“Se minaron 722 BTC, frente a los 780 BTC del primer trimestre del ejercicio 2023. La menor producción de bitcoin se debió principalmente a la mayor tasa de hashrate global durante el período”, señalan desde la compañía.
Asimismo, los costes de electricidad aumentaron hasta los 7,4 millones de dólares, en comparación con los 6,6 millones de dólares del primer trimestre fiscal. Según Iris Energy, esto se debió al “crecimiento de la tasa de hashrate durante el periodo y a los cargos por exceso de demanda atribuibles a la capacidad de energía no utilizada (tras la finalización de los acuerdos de alojamiento en relación con algunas de las facilidades de financiación de equipos de recurso limitado del grupo)”. Además, la empresa incurrió en otros gastos corporativos, como el mantenimiento de la sede, de 9,3 millones de dólares frente a los 8,0 millones de dólares del anterior trimestre.
Por otra parte, Iris ha asegurado está libre de deudas tras extinguir sus préstamos a finales del año pasado. La compañía también está considerando vender cualquier minero excedente de más de 5,5 EH/s de capacidad de autominado “para reinvertir en iniciativas de crecimiento y/o fines corporativos”.