Coinbase: si EEUU no regula las 'criptos', China será el líder financiero mundial
"Si nos quedamos cortos hoy, la próxima generación de estadounidenses pagará el precio"
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Continúa el enfrentamiento entre Coinbase y Estados Unidos. Brian Armstrong, consejero delegado y cofundador de la criptobolsa, ha señalado que “naciones adversarias” como China podrían ser las principales beneficiadas de la falta de claridad y la aproximación estricta de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) al mercado de las criptomonedas.
“El mercado de las criptomonedas ha sufrido recientemente algunas turbulencias. Esto puede hacer que los responsables políticos se sientan tentados a considerarlo una clase de activos inestable. Pero estarían pasando por alto el panorama general. No ver que las criptomonedas son mucho más que transacciones individuales pone en peligro el papel de Estados Unidos como líder financiero mundial y centro de innovación”, ha subrayado Armstrong en un artículo publicado en ‘MarketWatch’.
El CEO de Coinbase ha vuelto a pedir que EEUU proporcione la claridad normativa “necesaria” para “garantizar la protección de los consumidores y hacer realidad la promesa de las ‘criptos’”, en lugar de las “amenazas de medidas restrictivas” que están recibiendo. “Al aplicar políticas restrictivas, Estados Unidos está deslocalizando involuntariamente la criptoinnovación. Este cambio comprometerá el legado estadounidense de avances tecnológicos pioneros y debilitará nuestra posición de seguridad nacional”, ha asegurado.
In today's @MarketWatch I'm sharing an op-ed encouraging policymakers to see the big picture with crypto. It's important for American technology leadership and national security that this industry be built (at least in part) in America. https://t.co/I1702aHDGf
— Brian Armstrong 🛡️ (@brian_armstrong) May 30, 2023
“Las cadenas de bloques criptográficas no son servicios financieros; son una tecnología transformadora que puede revolucionar una amplia gama de sectores, de los cuales los servicios financieros son sólo un ejemplo”, ha sentenciado Armstrong. “Cada día, millones de personas de todo el mundo utilizan estas tecnologías para agilizar sus interacciones con el sistema financiero tradicional. Facilitan los pagos transfronterizos, ofrecen protección contra la inflación, reducen las comisiones y los tiempos de espera y democratizan el acceso a los servicios financieros en regiones donde no está garantizada la igualdad de acceso. Ahora, incluso estamos viendo cómo estas cadenas de bloques sirven de plataforma para que los creadores moneticen su trabajo a perpetuidad, en lugar de ver cómo el valor de su obra se explota en mercados secundarios”, ha añadido.
En este sentido, el ejecutivo de Coinbase ha recalcado que la moneda “ha sido siempre sinónimo de innovación” y que “el sistema financiero del siglo XX, impulsado por la tecnología, contribuyó a convertirlo en el siglo norteamericano”.
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“El dólar estadounidense ha anclado el sistema económico mundial desde 1944. El papel del dólar estadounidense como moneda de reserva mundial le confiere innumerables beneficios de poder blando y duro”, ha indicado Armstrong, quien cree que las inversiones públicas de Estados Unidos pusieron de manifiesto que la nación que impulsa la innovación del sistema financiero mundial “es la mejor posicionada para salvaguardar los intereses económicos de su pueblo, proteger sus intereses nacionales y propagar sus valores”. Pero ahora, añade, “nos enfrentamos a una nueva amenaza”.
Armstrong cree que el Partido Comunista Chino está promoviendo estas potentes plataformas de rápido crecimiento en todo el mundo a través de sus iniciativas Belt and Road, con su sistema de crédito social incorporado. “Con el reciente lanzamiento de su yuan digital, China pretende desafiar directamente al dólar estadounidense y su papel en el comercio mundial. Teniendo en cuenta estos movimientos y la estrategia de China de aprovechar la tecnología financiera para proyectar sus propios intereses nacionales, no debería sorprender que Hong Kong se esté posicionando como un centro criptográfico mundial”, ha apuntado.
Pero no sólo China ve las posibilidades. “Las criptomonedas, como Internet antes que ellas, tienen el potencial de modernizar las finanzas y muchos otros sectores, desde las cadenas de suministro hasta las redes sociales, al ofrecer una plataforma más rápida, barata, privada y accesible. Ya está en marcha. Conscientes de ello, las capitales financieras tradicionales, como el Reino Unido, Emiratos Árabes Unidos, Brasil, Japón, la Unión Europea, Australia y Singapur, también están compitiendo por convertirse en centros de criptomonedas”, ha relatado.
“Si nos quedamos cortos hoy, la próxima generación de estadounidenses pagará el precio”, ha sentenciado Armstrong. Y es que, según el CEO de Coinbase, “cuatro de cada cinco estadounidenses piensan que el sistema financiero actual no sirve a sus intereses”. “El 70% cree que sus hijos estarán peor. Esta insatisfacción coincide con la obsolescencia tecnológica de nuestra infraestructura financiera, lo que aumenta el riesgo de que Estados Unidos ceda su influencia”, ha añadido.
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Armstrong cree que la regulación inteligente promovida durante los años 90 y principios de los 2000 permitió a Estados Unidos definir la era de Internet. Ahora, indica, al igual que entonces, “es el momento de que el Congreso aproveche la oportunidad histórica que presentan las criptomonedas y apruebe una legislación integral que proteja a los consumidores y fomente la innovación”.
“Hoy estamos gastando miles de millones para repatriar tecnologías como los semiconductores y la infraestructura 5G. Deberíamos aprender de ese error. Traer la innovación en criptomonedas y blockchain de vuelta a Estados Unidos dentro de una década requerirá un esfuerzo colosal y sostenido que puede no tener éxito. Pero podemos ahorrarnos esa lucha si prevalece la cabeza fría y trabajamos juntos. Modernicemos nuestro sistema financiero y reafirmemos nuestro papel de líder tecnológico mundial en lugar de abdicar de él”, ha concluido.
Recientemente, Coinbase ha respondido a la SEC después de que esta rechazase crear una normativa para los criptoactivos asegurando que la campaña del regulador “acarrerará costes innecesarios al sector” de los activos digitales. Firmas como Berenberg o Citi se muestran poco optimistas con el potencial de Coinbase por este litigio, mientras que otros creen que la criptobolsa puede partir con ventaja en el caso.
