Contra lo esperado, el mercado podría animarse con la victoria del republicano
Desde hace meses que los mercados del Viejo Continente se mantienen cotizando lateralmente sin decidirse a confirmar lo que parece que podría ser un cambio de tendencia a medio y largo plazo. Curiosamente, la victoria el pasado martes de Trump en las elecciones norteamericanas podría ser el detonante, contra todo pronóstico, que traiga este esperado cambio de tendencia.
Si echamos un vistazo al Dow Jones podemos ver cómo, tras la victoria de Donald Trump, ha superado lo máximos históricos que presentaba en los 18.668 puntos. El selectivo norteamericano ha confirmado el final de la corrección del corto plazo tras acercarse a la media de 200 sesiones y actualmente cotiza sin resistencia alguna, lo que nos invita a pensar en una extensión de su tendencia alcista hasta por lo menos en nivel de los 19.200 puntos.
La cuestión es cómo puede trasladarse esta situación al mercado europea. En el caso del EuroStoxx 50. la apertura del miércoles fue fuertemente bajista. El índice se dejaba cerca de un 5% en los primeros compases de la sesión y todo nos hacía pensar en lo peor tras ver como perforaba el soporte de los 2.888 puntos.
No obstante, a medida que pasaba el día, el selectivo europeo recuperaba posiciones hasta terminar el día en positivo. Como no podía ser de otra forma, el volumen negociado fue muy alto, por lo que la figura realizada tiene un peso muy importante para las próximas semanas. Salvando las distancias, el movimiento del pasado miércoles nos hace pensar en el comportamiento del mercado tras el Brexit. La resistencia clave del corto plazo se encuentra en los 3.100 puntos. Si en las próximas sesiones el Eurostoxx 50 consigue superar este nivel de precios, estaríamos ante una importantísima mejora técnica.
Si echamos un paso atrás, hay que tener muy presente que el selectivo podría estar dando forma a un doble suelo en los 2.700 puntos y que la superación de los 3.100 puntos confirmaría esta figura que nos haría pensar en una subidas mínimas del 10%. Cubriría así el gap bajista que se dejó en los primeros compases del año.
El Dax 30 ha tenido un comportamiento muy parecido. La apertura del pasado miércoles le permitía comenzar la sesión por debajo del soporte de los 10.173 puntos. El selectivo alemán volvía a probar el soporte que le ofrece la media de 200 sesiones, promedio que ha funcionado a la perfección. Al igual que el Eurostoxx 50, el selectivo terminaba el miércoles con subidas y muy cerca de la resistencia clave del corto plazo que presenta en los 10.826 puntos.
Su comportamiento en este nivel de precios es clave. Si al final confirma su rotura estaríamos ante el inicio de una recuperación para los próximos meses que podría terminar con la cotización del selectivo alemán en los 11.400 puntos, lo que supone una revalorización del 7,50% desde los niveles actuales.