El principal índice del mundo se ha dejado un 12% desde los máximos históricos de principios de año
Un 'martillo' es una formación que se da con bastante frecuencia en los mercados. Consta de una única vela, que se produce normalmente al final de una fase correctiva prolongada y muchas veces tiene lugar cerca de soportes clave. Interpretándose esta como un punto de inflexión de la tendencia, pasando de bajista a alcista.
Short Term | Long Term | |
Trend | 3 | 2 |
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Support | 4212 | |
Résistance | 4500 | 4800 |
O al menos nos estaría anticipando el inicio de un importante rebote de corto plazo. Estamos hablando de una sesión en la que el precio cae con fuerza durante gran parte del día para después recuperarse y cerrar cerca de los máximos, o en máximos. Pero dejando eso sí una larga mecha inferior por debajo. El volumen negociado también suele ser bastante más alto que el de las sesiones precedentes.
Los martillos acostumbran a tener mechas largas en su parte inferior (sombra) de al menos el doble del cuerpo real. Casi lo de menos es si el cuerpo real es blanco o negro, aunque si es blanco las implicaciones de fortaleza pueden ser mayores. Y si al mismo tiempo coincide con el hecho de que alguno de los principales osciladores de momento (RSI, estocástico, etcétera) arroja lecturas extremas de sobreventa, mejor que mejor.
Y todo eso es lo que tenemos en el S&P 500, o en el caso que nos ocupa el futuro del mini S&P 500. Ahora bien, eso no quiere decir que tenga que rebotar con fuerza de manera inmediata desde aquí. De hecho, en ocasiones los precios vuelven de nuevo a la zona de mínimos de la caída (4.212) para desde ahí reestructurarse al alza. Por lo tanto, la condición que le hemos de exigir al 'martillo' de este lunes es que bajo ningún concepto se pueden perder (y menos en precios de cierre) los mínimos de la sesión. En la medida en que aguanten es cuestión de tiempo que el rebote se termine produciendo y lance los precios a cotas claramente superiores.