El euro/dólar sigue perfectamente canalizado a la baja

En el muy corto plazo tenemos un pequeño 'cabeza y hombros' en el euro/dólar que puede servir, si este finalmente se cumple, para llevar al cruce a la zona de soporte que presenta en los mínimos de noviembre (1,0980). Y por debajo ya no hay nada hasta los mínimos de 2019 en los 1,0878. Con todo, lo realmente importante es que el cruce sigue desplazándose dentro de un impecable canal bajista desde julio de 2018, construyendo como no puede ser de otra manera máximos y mínimos decrecientes. Por arriba, por el lado de las resistencias, la más importante no puede estar en otro lugar que no sea el último máximo decreciente, los máximos de principios de año en los 1,1240. Solo por encima de este último nivel tendremos una primera señal de fortaleza real más allá de los típicos rebotes contra tendencia.