El índice estadounidense se deja un 8% en las últimas cuatro sesiones
El principal índice del mundo acumula una caída del 20% desde los máximos históricos que alcanzó el pasado mes de septiembre en los 2.940 puntos.
En la sesión del martes de la semana pasada comentamos que el S&P 500 pulverizaba importantes soportes, al tiempo que activaba un nuevo gran 'cabeza y hombros' (lea aquí el análisis). Lo que quiere decir que ya podemos dar por alcanzando el primer objetivo de caída de la amplia formación bajista a la que hemos hecho referencia recientemente, los 2.300 puntos (este lunes el mínimo se marcó en los 2.351). Los niveles de miedo arrojan lecturas extremas y todo ello con un VIX (índice del miedo) en los 36 puntos, niveles no vistos desde principios de febrero. Lo que quiere decir que, en teoría, no deberíamos tardar mucho en asistir a importantes rebotes contra tendencia. Recuerden que los índices se mueven siempre en dientes de sierra, tanto al alza como a la baja. O lo que es lo mismo, que hasta para continuar cayendo los precios tienen que rebotar con fuerza.
Técnicamente, tenemos al índice justo en niveles potenciales de soporte, como es la MM200 semanal. Esta ha estado actuando con precisión máxima como resistencia/soporte desde hace diez años. Y ahora la tenemos ahí, en los 2.350 puntos. Por lo tanto, se puede decir que en el rango de los 2.300-2.350 puntos tenemos una primera e importante zona de soporte. Y por debajo ya no hay nada hasta la zona de los 2.130 puntos, los máximos de 2015.
Mientras que en escala lineal, podemos encontrar una potencial zona de soporte en el rango de precios comprendido entre los 2.200-2.250 puntos, por donde pasaría la directriz alcista de largo plazo, la que une los mínimos crecientes desde 2009.