La operadora se está desplazando dentro de un estrecho rango de precios, entre los 8,10 y los 8,25 euros
Las caídas de la segunda parte de marzo encontraron soporte en la operadora, al tick, en el nivel de ajuste/retroceso del 61,8% de Fibonacci del tramo alcista previo que llevó al título a revalorizarse un 10%.
En las últimas semanas/meses hemos visto cómo los títulos de Telefónica están consiguiendo aguantar el tipo mejor que el conjunto del mercado cuando vienen mal dadas. La reciente corrección hacia la zona de los 7,7 euros encaja dentro de los parámetros normales por cuanto estaríamos hablando de un ajuste del 61,8% de Fibonacci del impulso alcista previo. Lo que quiere decir que, en teoría, por encima de la zona de los 8,25 euros (la parte superior del lateral de la semana pasada) en precios de cierre tendríamos una importante señal de fortaleza que, como mínimo, debería servir para lanzar al título hacia la resistencia de los 8,6 euros, los máximos anuales. Y por encima los 9-9,05 euros. Y mientras tanto solo cabe esperar, pues por el momento el precio ha demostrado no se capaz de dejar atrás la resistencia que presenta en los máximos de marzo.