Europa Press | 23 feb, 2019 11:00
MADRID, 23 (EUROPA PRESS) Fernando Muñoz recibió una llamada de la Guardia Civil el 5 de agosto de 2007 que le cambió la vida: "Su hijo ha tenido un accidente de coche y ha muerto". Estas fueron las palabras con las que supo que su hijo Germán, de 25 años, se había salido de la vía y había chocado contra un bloque de hormigón.
Germán se fue de viaje con su novia a las ocho de la mañana y la Guardia Civil se puso en contacto con su padre a la una del mediodía. Su mujer, que estaba a su lado, escuchó como Fernando decía '¿Cómo que ha muerto?' y ambos, según relata, quedaron destrozados.