Eduardo Segovia | Bolsamania | 26 oct, 2019 06:00
Esta semana, su Excelencia el Generalísimo ha sido privado de su descanso eterno por la horda roja, que lo ha sacado del egregio monumento del Valle de los Caídos y lo ha vuelto a enterrar junto a su esposa, doña Carmen Polo, nada menos. Mientras estos dramáticos acontecimientos sucedían, los enemigos de España no descansan. En el interior, los separatistas catalanes han montado turbamultas y prendido hogueras, y la policía casi no les ha sacudido. Esto con Franco no pasaba.