Antonio Papell | Bolsamania | 08 may, 2015 11:52
Más de un centenar de encuestas elaboradas en los últimos meses habían dibujado un panorama poco menos que apocalíptico en el Reino Unido: los dos grandes partidos, conservador y laborista, fuertemente desgastados ambos, quedarían muy lejos de la mayoría absoluta, lo cual, unido al declive de los liberaldemócratas, obligaría a complicadísimas alianzas para conseguir la estabilidad. El nacionalista Scottish National Party (SNP) y el euroescéptico UKIP se convertían en dichas hipótesis en elementos clave de unas negociaciones arduas y complejas…