Antonio Papell | Bolsamania | 29 ago, 2016 11:19 - Actualizado: 29 ago, 2016
La reiteración de sesiones de investidura y de elecciones produce diversos efectos intelectuales y sociales: de un lado, la ciudadanía se percata de que el régimen político del 78 está firmemente arraigado dado que ni siquiera la frivolidad de la clase política es capaz de ponerlo en riesgo. El Estado de Derecho funciona sin vacilaciones ni dudas; la sociedad civil avanza con irritación pero también con determinación, sin dejarse impresionar por los desatinos; hasta la economía, en su ambiente propicio, nos está sorprendiendo a todos al registrarse indicadores insólitamente buenos, sin que la provisionalidad y la inestabilidad políticas influyan en el devenir.