Pedro Calvo | Bolsamania | 22 ene, 2018 06:00
Enero de 2015. La inflación de la Eurozona bordea peligrosamente el 0%. Nadie quiere pronunciar la palabra maldita, por aquello de las profecías autocumplidas, pero el caso es que todo el mundo en Fráncfort pensaba en la amenaza de la deflación. Y Mario Draghi, con ese entorno a favor, desplegó todo el arsenal del Banco Central Europeo (BCE).