Noemí Jansana | Bolsamania | 04 dic, 2019 06:00 - Actualizado: 04 dic, 2019
El presidente de los EEUU, Donald Trump, no ha cerrado -ni al parecer tiene intención de hacerlo en un futuro próximo- el frente de la guerra comercial con China y ya se ha metido de lleno en otro. Europa, más concretamente Francia, es ahora el objetivo de la administración republicana, que ha demostrado que no tiene remilgos en seguir imponiendo aranceles a diestro y siniestro y que se siente más que cómoda al usar las relaciones comerciales como un “arma política, económica y diplomática”, según indican los expertos. Pero, en el fondo, la “pataleta arancelaria” en la que se ha embarcado la Casa Blanca no es más que un aviso a Pekín.